El sindicato UGT de Andalucía inició ayer la mudanza de todas sus dependencias de la calle Antonio Salado, en el centro de Sevilla, donde se encuentra la sede regional, a la sede de Blas Infante, donde actualmente se ubica UGT Sevilla. El proceso, que se espera que esté culminado a primeros de octubre, se hará de forma progresiva, trasladando los diferentes departamentos y con la instalación de un servidor informático. El coste de la mudanza es de 30.000 euros, informaron fuentes del sindicato. UGT-A ocupará toda la séptima planta, las dos alas, del edificio ubicado en el barrio de Los Remedios.

La secretaria general de UGT-A, Carmen Castilla, ya explicó que la mudanza viene motivada, según ha explicado, por "ahorrar gastos y por potenciar la cercanía con los afiliados y sindicalistas de Sevilla". Castilla recordó entonces que mantener la sede del centro de Sevilla abierta supone un coste de 350.000 euros al año, toda vez que "hay que pagar luz, agua, mantenimiento y 60.000 euros de Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI)".

Frente a esas cifras, la sede de Blas Infante, que pertenece al Patrimonio Sindical Acumulado (PSA), tiene un coste de mantenimiento de unos 70.000 euros anuales, incluido el IBI, y además los gastos de mantenimiento son compartidos.