Ante la continua superación de los récords en los casos covid-19 en los distintos indicadores de la pandemia (muertos, test positivos, hospitalizaciones e ingresos en UCI) Andalucía camina hacia restricciones más duras. Las autoridades sanitarias, andaluzas y nacionales, ya lo han advertido en repetidas ocasiones.

Tras una nueva reunión del comité de expertos, que está prevista para el próximo domingo 8 de noviembre, la Junta de Andalucía anunciará las nuevas limitaciones a la movilidad de la población para tratar de contener una infección que no da tregua en la comunidad autónoma. La previsión es que los profesionales se reúnan a media mañana y el propio presidente, Juanma Moreno, comparezca al término del encuentro para informar de las nuevas actuaciones que se tomarán en Andalucía.

La medida que se barajaba, en un principio, era adelantar el toque de queda al horario de tarde, una limitación a la movilidad que permitiría concentrar la vida económica en la jornada matinal para preservar la economía y amortiguar el daño en el tejido productivo. No obstante, queda sujeto de que legamente tenga cobertura jurídico y de las decisiones que también se tomen por el Gobierno para todas las autonomías.

Si las cifras epidemiológicas se mantienen, "no nos queda más remedio que limitar la movilidad y los horarios de abajo a arriba" y, llegado el caso, adelantar el toque de queda hacia la tarde, manifestó el presidente andaluz, Juanma Moreno, en una comunicación en Twitter.

Esta medida se perfila inviable hoy, ya que el actual estado de alarma limita a las 22:00 el toque de queda, como muy pronto.

El próximo lunes 9 de noviembre, la Junta de Andalucía tomará las riendas del nuevo decreto de alarma, y ante la evolución de la segunda ola, el abanico de posibles restricciones no contempla el confinamiento por la tarde, aunque sí hay margen para decretar cierres en el sector de la restauración en la jornada vespertina.

El confinamiento domiciliario de marzo, durante las 24 horas, también está descartado, de momento. Sería el último paso que darían las las autoridades sanitarias para frenar al coronavirus. Ante esta posibilidad el consejero de Salud, Jesús Aguirre, ha pedido  al Gobierno de España que aclare si tiene intención de decretar encierros domiciliarios. En caso de que sean decretados, Aguirre ha pedido unidad de criterio, "sin medidas a la carta", según informaron fuentes de la Junta a este periódico.

El Gobierno, por su parte, ya comunicó hace dos días no que piensa declarar de momento el confinamiento domiciliario en España. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, lo dejó claro esta semana, tras reunirse con los consejeros de las comunidades autónomas en la interterritorial de Salud.

Según los últimos datos, la comunidad vuelve a registrar un aumento considerable de positivos y de ingresados, que alcanzan los 3.198 pacientes, 422 de ellos en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI).