La recaudación tributaria de la Junta de Andalucía ha cerrado 2021 con un récord de ingresos. Concretamente, las arcas autonómicas ingresaron el año pasado 17.261 millones de euros, un 5,12% más que en 2020 y un 2,58% más que en 2019, el año previo al estallido de la pandemia. Este dato coincide también con un récord de recaudación fiscal en el conjunto del Estado, impulsada por la recuperación económica y el buen comportamiento del mercado laboral.

Como es habitual, la mayor parte de los ingresos fiscales proceden del IRPF y el IVA, que aportan des de cada tres euros recaudados en la comunidad a pesar de que en el primer caso los ingresos crecen por debajo de la media (1,34%) y en el segundo incluso caen respecto a 2020 (-1,42%). El peso de estos dos gravámenes en el conjunto de la recaudación tributaria ha crecido en los tres años completos con el Gobierno del PP y Cs en la Junta, al pasar del 64,9% de 2018 al 66,3% registrado en el ejercicio recién finalizado. Eso es así a pesar de que los impuestos que han presentado un mejor comportamiento en 2021 son, precisamente, los que han formado parte de las sucesivas rebajas fiscales que ha puesto en marcha el Ejecutivo de Juanma Moreno.

Los cuadernos de recaudación tributaria que publica cada mes la Consejería de Hacienda y Financiación Europea informan sobre la evolución de ingresos de quince figuras fiscales y en 2021 sólo tres han visto caer sus cifras respecto al pasado año. Uno de ellos es el citado IVA que, pese a su rebaja en la recaudación es el impuesto que más aportó a las arcas autonómicas el pasado año (6.091 millones de euros). También se registró una caída en los impuestos Especiales de Fabricación, que con  2.402 millones el pasado ejercicio experimentaron una reducción del -0,65%. El tercer tipo que sufrió una caída de ingresos es el grupo de impuestos ecológicos, que sufrió una rebaja relevante en términos porcentuales (-7,8%), pero es cierto que su aportación es mucho menor, de unos 5,4 millones de euros. 

Estas caídas se compensan con el IRPF, que suma 5.597 millones al conteo de la Consejería de Hacienda, pero sobre todo con los crecimientos de dos cifras de los tributos que han pasado por las reformas fiscales de la Junta. Llama especialmente la atención el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, que tiene, desde primavera, un tipo único del 7% y ha visto crecer sus aportaciones en un 52% para superar los mil millones de euros y alcanzar una recaudación de 1.326 millones en 2021.

El porcentaje de crecimiento es similar (49,2%) en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, que aportó 258,5 millones a las arcas autonómicas en 2021. La cifra es muy similar a la recaudad por la Consejería de Hacienda en 2019, el primer año del nuevo Gobierno, que comenzó su andadura bonificando al 99% este tributo para herencias y donaciones entre familiares directos en primer y segundo grado. La recaudación de este impuesto creció de forma llamativa en los primeros meses del pasado ejercicio, lo que hace pensar que muchas declaraciones son todavía retrasos de 2020, cuando hubo una moratoria en varios impuestos con motivo del estallido de la pandemia. En el mes de diciembre, por ejemplo, su recaudación respecto al mismo mes de 2020 cayó en un -2,3%.

También crece de forma llamativa el impuesto de Actos Jurídicos Documentados, que también entró dentro del paquete de bajada fiscal de la pasada primavera y que acabó ampliándose en diciembre con la aprobación definitiva de la reforma de la Ley de Tributos Cedidos. Este impuesto ha visto crecer su recaudación en un 24,4% en 2021 hasta llegar a los 453 millones de euros. El crecimientos también es muy relevante en las tasas, que han recaudado 95,2 millones (82% más que en 2020) y que también se han reformado por medio de la nueva ley de tasas y precios públicos. Al ser aprobada a final del año no se puede afirmar que el buen comportamiento de estos tipos tenga que ver con el nuevo texto que las regula. 

En dos cifras crecen el  impuesto sobre determinados medios de transporte, con 69,6 millones (un 36% más); otros impuestos de derecho público, con 597,1 millones (34% mas); el impuesto al Patrimonio, con 109,7 millones de euros (20,3% más); el impuesto a las actividades de juego no presenciales, con 23,3 millones (13,4% más). En crecimiento de una cifra está el impuesto a las actividades de juego presenciales, que recauda 90,4 millones (7,42% más), mientras que el canon de mejora se queda casi igual, con 139,5 millones y un 0,14% más que en 2020. Resulta llamativo que el impuesto que más aumenta en su recaudación fue el impuesto de hidrocarburos, que experimentó una subida del 136%, pero sólo reportó a las arcas autonómicas 340.428 euros.