Si hay un personaje a destacar en uno de los municipios sevillanos con mayor número de habitantes en la provincia, ese es Abate Marchena. Nacido hace 250 años, fue protagonista activo de la Revolución Francesa y responsable de la llegada a España de grandes ideas de la Ilustración. Por ello, su localidad natal, Utrera, se ha propuesto recuperar su figura a través del Año Cultural Abate Marchena, en el que se propone al municipio como “una ciudad de referencia cultural y un destino perfecto para una escapada diferente en la que se conjuga historia, cultura, patrimonio y gastronomía”, según palabras de Cristóbal Ortega, comisario de la iniciativa.

En el Año Cultural se pretende aprovechar una doble oportunidad. En primer lugar, desde Utrera existe el compromiso de “recuperar a uno de los grandes ilustrados andaluces y españoles”; y, por otro lado, difundir su figura y reconocer el lugar que se merece en la galería de personajes ilustres utreranos. En su propuesta, Cristóbal Ortega ha establecido al personaje, momento y ciudad como líneas maestras para diseñar un conjunto de actividades que “están mostrando al mundo de forma realista y sin artificios quien fue este insigne utrerano”. Artes escénicas –teatro, música– , literatura o educación son áreas que han tomado y tomarán protagonismo en esta iniciativa. En general, la pretensión de la muestra según su comisario es la de “acercar la cultura en mayúsculas a toda la ciudadanía, tal y como lo deseó el Abate Marchena”.

A través del Año Cultural Abate Marchena se propone una nueva y particular ruta por este municipio sevillano. Junto a sus singulares calles empedradas del casco histórico, declarado Bien de Interés Cultural, la mayoría de actividades incluidas en el programa que se desarrollará hasta final de 2018 tomarán como escenarios iglesias y conventos, el ayuntamiento y el castillo.

Artes escénicas, educación y literatura componen la programación

Sin ir más lejos, el monumento más antiguo de Utrera ha cedido su patio de banderas para el desarrollo de la programación musical, inaugurada el pasado 15 de junio con el concierto del cantaor Tomás de Perrate y Proyecto Lorca, que estrenaron el espectáculo Revolución. Música popular, música cultivada y flamenco al filo de la Revolución francesa, una propuesta creada expresamente para el Año Abate y dirigida por artista Pedro G. Romero. El segundo concierto en el Castillo corrió a cargo de la Banda Sinfónica Unificada de Utrera que nos situó en la época para contarnos la vida del protagonista.

Tras los dos conciertos en el castillo de la ciudad, y una magnífica inauguración del ciclo de la mano de la Accademia del Piaccere, en la Iglesia de Santiago el pasado 8 de junio, se incorporarán al programa la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla (28 de septiembre en la Plaza del Altozano) y la Orquesta Barroca de Sevilla (17 y 18 de noviembre en el Teatro Municipal).

Las artes escénicas sirven para recordar y divulgar la trayectoria y las aportaciones del Abate, mediante iniciativas como Vidas y ficciones del Abate Marchena, una obra que muestra las principales hitos en la vida del mismo; y un taller impartido por la Escuela Pública de Formación Cultural de Andalucía y el director teatral Juan Dolores Caballero, cuyo fin es llevar a escena –en la Casa de la Cultura– la tragedia Polixena, uno de los hitos del Abate y que no se había representado hasta la fecha.

Una serie de conferencias –de Luis Alberto de Cuenca, José Calvo Poyato, Javier Sierra y Santiago Posteguillo, entre otros– y un libro colectivo, coordinado por la escritora y periodista Eva Díaz Pérez, ha reunido relatos de “grandes nombres de la literatura nacional actual” acerca de las muy diversas peripecias del Abate (que será publicado por la Fundación José Manuel Lara).

Destaca, también, la nueva biografía sobre el intelectual, editada por Pedro Sánchez Núñez, una segunda edición de la ya publicada hace 18 años y en la que se han realizado nuevas investigaciones y hallazgos bajo el título de El Abate Marchena, biografía de un utrerano entre Robespierre y Riego aprovechando el escenario de una importante efeméride para volver a esta obra.