Cómo elegir la bebida ideal para cada plato de la cena de Nochebuena

Los días navideños la comida está muy presente y en ocasiones se ingieren demasiadas cantidades de comida porque hay mucho donde elegir, por eso hay que comer con mesura y en pequeñas cantidades para poder probarlo todo o casi todo sin necesidad de sufrir alguna indigestión o empacho.

Las comidas y cenas de estas fechas suelen ir regadas con una importante cantidad de vino, de manera que hacer una buena selección para maridar los platos de la cena de Nochebuena, es la opción ideal.

Dependiendo de la cantidad de comida que haya la lista de vinos que habrá que añadir en la compra será más larga o más corta y también dependerá de quienes vayan a beber y la cantidad de vino que son capaces de tolerar.

Cada casa es un mundo y por eso las cenas de Nochebuena no son iguales en cada una de ellas. Hay quienes prefieren poner un poco de picoteo antes de cenar, donde hay algunos platos como jamón, caña de lomo, huevos rellenos y algunos canapés, en esta ocasión el maridaje podría ser ideal con un vino rosado o un vino blanco seco.

La sopa es uno de los platos indispensables en muchos de los menús de Nochebuena y para acompañar a este plato caliente es seguir con el vino blanco seco.

Los platos principales pueden variar entre carnes y pescados, dependiendo de lo que se elija deberá ser maridado con un vino u otro. En el caso de las carnes habrá que tener en cuenta qué tipo de carne es, si se trata de una suave o blanca lo ideal es servir un vino rosado o un tinto joven; no obstante, cuando se optan por carnes rojas o de caza, que tienen mucho más sabor tiene más sentido acompañarlas de un vino tinto añejo.

En cuanto al pescado, no todos son iguales, ni en cuanto sabor, como en textura y de ello dependerá el vino que se vaya a servir. Si se va a comer un pescado blanco es preferible acompañarlo de un vino blanco ligero o un rosado joven, para poder degustar el plato principal sin que la bebida interfiera en el sabor. Si por el contrario se escoge un pescado azul o marisco, la botella que debería abrirse sería la de un vino blanco pero que tuviera más cuerpo, incluso hay quienes se atreven con un cava.

Para finalizar la noche hay quienes no se levantan de la mesa sin haber probado algo dulce y para ellos también hay que tener en consideración qué tipo de vinos maridaría mejor. Para estos postres un vino generoso o un palo cortado son la opción ideal, aunque no hay que olvidarse de los clásicos como pueden ser el champagne o el cava, que son infalibles en estas fechas.