El conjunto senior masculino de Balonmano Montequinto logró una ajustada y trabajada victoria (21-23) en su visita a Pozoblanco, en un encuentro con un final bronco y alocado que supuso dos puntos más para el cuadro que dirige Ricardo Márquez.

Las defensas tuvieron el protagonismo en la primera mitad, en la que ambos conjuntos se alternaron en el marcador. El BM Montequinto gestionó muy bien sus exclusiones, sacando a su portero y consiguiendo parciales que impidieron a los locales abrir brecha. El tiro exterior quinteño funcionó bien en este periodo, pero la buena actuación del portero local impidió una mayor ventaja foránea en el descanso, al que se llegó con un resultado provisional de 10-11.

A la vuelta de los vestuarios, una salida fulgurante de los sevillanos los colocó por delante, para dar paso a una superioridad cordobesa y llegar a una igualdad que se mantuvo varios minutos. Pero casi mediada la segunda mitad los quinteños alcanzaron con facilidad la meta contraria y se fueron por cuatro goles.

Un tiempo muerto local en el minuto 19 cambió la defensa pozoalbense para hacer marcaje individual a Alberto Serradilla y a Carlos Regordán, en un intento por desbaratar la estrategia quinteña. Pareció funcionar y recortó la ventaja visitante a dos goles, pero dando paso a unos minutos finales alocados, aparentemente sin estrategias definidas y con proverbiales intervenciones del meta Álvaro Espino para dar alas a sus extremos y defender con uñas y dientes los dos puntos conseguidos.