El entrenador de Osasuna, José Antonio Camacho, afirmó ayer que confía en la progresión de su equipo en sus aspiraciones de salir de los puestos de descenso y reiteró lo expuesto a Diario de Sevilla esta semana, que no se siente culpable del descenso en la etapa que trabajó en Nervión. "En Sevilla tenemos que salir con las mismas ideas que siempre. El equipo sabe jugar al fútbol, sabe lo que tiene que hacer y juega muy ordenado. Lo que falta es saber qué tiene que hacer en muchos momentos, saber controlar el partido", dijo en Tajonar. Camacho apuntó como claves para tratar de sacar un buen resultado la intensidad y concentración para poder superar al Sevilla: "Ellos saben que nosotros no le vamos a dar la espalda y vamos a apretar. Tenemos que estar con intensidad y tensión, y preparados hasta que acabe el partido, porque se nos están yendo partidos por falta de atención". En este sentido, abundó en que ello no quiere decir que plantee un equipo más defensivo. "Yo no soy capaz de decir a un jugador que vamos a jugar más defensivos; eso lo dicta el partido", matizó.

"Ellos juegan en su campo y en su ambiente y tienen un equipo fuerte. El Sevilla es un equipo totalmente competitivo que sabe lo que tiene que hacer en cada momento", continuó antes de optar por apartarse de polémicas pasadas entre ambos equipos: "Va a haber tensión y el público va a estar a tope con su equipo, pero esto es el fútbol. Si quieres jugar grandes partidos, tienes que aceptar esto. Prefiero un campo lleno y con ambiente que un campo vacío y desolado".

Por último, el técnico manifestó que no le preocupa "en absoluto" cómo le reciba la afición sevillista en el Ramón Sánchez-Pizjuán: "Yo me fui de allí hace muchos años. Han pasado muchos entrenadores, han hecho mucha vida y mucha historia. Yo estuve 19 partidos e hice lo que pude, ni más ni menos".