Esperando a la juez Alaya

Por si no tuviese suficiente con los ERE y Mercasevilla, el caso que en teoría podía conducir de forma sencilla, el de Lopera, o el del Betis, como se prefiera, le está dando quebraderos de cabeza en los últimos días. Sobre todo desde que este diario destapara cierta prácticas mercantiles de José Antonio Bosch que acabaron con sus días en el club verdiblanco, al perder el favor, o la sumisión, que le profesaba el resto de consejeros. Paralelamente, la juez Mercedes Alaya perdió su confianza en el administrador judicial, quien en breve debería ser removido de su cargo.

Y ésa es precisamente la piedra filosofal en la interinidad de este Betis, que va ya para cuatro años. La magistrada que instruye el caso debe pronunciarse con inmediatez a la vista de que el club se halla en stand by al saber los propios consejeros que sin el respaldo del 51,34% de las acciones de Farusa que aún controla Bosch no se encuentran legitimados.

Con todo, a Alaya, quien el 8 de enero supo a través de una carta de Bosch que éste quería cesar en su actividad como administrador judicial (hay quien dice que ella lo obligó), no lo está teniendo nada fácil para encontrar un sustituto, aunque se rumoree insistentemente con el nombre de María Jesús Guerrero, jurista especializada en derecho mercantil y viuda de Juan Manuel Gómez Porrúa, cabeza visible de la originaria administración judicial, compuesta también por Luis Huidobro y Rafael Gordillo, y hombre fuerte al que sustituyó el orillado Bosch.

Es más, hay quien apunta que el nombre de éste fue sugerido por un miembro de las plataformas demandantes contra Lopera cuando ella ya había pensado en la propia María Jesús Guerrero.

Hoy también se habla del propio Huidobro, quien dejó el cargo, entre otras cosas, por discrepancias severas con Bosch, que desde el primer día pretendió, y consiguió, convertir el club en una autocracia.

Sea como fuera, hoy es el asunto primordial para que el Betis siga caminando, de ahí que las reuniones comenzaran a sucederse en la noche del miércoles nada más consumarse la eliminación copera del equipo en San Mamés. Adolfo Cuéllar -faltó su hermano Miguel- y Pedro Rodríguez de la Borbolla, de la Liga de Juristas (LJ); Hugo Galera, Francisco Galera, Rafael Salas y Emilio Soto, de Béticos por el Villamarín (BxV); y Cayetano García de la Borbolla, Camilo Puerto e Ignacio Carrasco, de Por Nuestro Betis, analizaron en dos horas y media en la clínica Infanta Luisa, de Triana, la actualidad del club y marcaron una especie de hoja de ruta a seguir. Aunque ésta, básicamente, depende de Alaya. Y, a la fecha, ninguno de los nueve sabe qué pasa por la cabeza de la juez, aunque todos manifestaron su confianza en que la salida que ésta tomará no afectará a las medidas cautelares que dictara en el mes de julio de 2010.

Porque cabe recordar que Alaya podría nombrar un nuevo administrador judicial o dar por finalizada la instrucción y levantar las medidas cautelares que pesan sobre Manuel Ruiz de Lopera y las acciones de Farusa.

Reunión con Alaya

Este grupo de nueve accionistas béticos, en vista de una situación que definieron como conflictiva, decidió, entre otros asuntos, intentar mantener una toma de contacto con la propia Alaya. Adolfo Cuéllar, Cayetano García de la Borbolla, Francisco Galera y Manuel Serrano -éste de BxV y ausente en la reunión por motivos profesionales-, todos ellos abogados, formarían la comitiva que se reuniría con la juez si ésta da su visto bueno. Con todo, hay quien dice que ésta cada vez se fía menos de sus posibles interlocutores y a la vista queda que la designación de Bosch ha resultado un rotundo fracaso que ha arrastrado al club a la situación actual: primer equipo medio descendido a Segunda División, cantera mal gestionada y en manos ajenas, club sin estructuras efectivas pero por contra cuajado de ejecutivos ineficaces y con elevados sueldos... Y, por supuesto, externalización de servicios con diversas empresas que están siendo investigados, así como el maquillaje que hubiera podido aplicar Bosch a la real situación económica de la entidad.

Un apunte: la comisión quiere solicitarle a Alaya que el nuevo administrador judicial no interviniese como consejero en el día a día del club y que se limitase a dotarlo de profesionales válidos.

Vis a vis con Guillén

Lógicamente, los miembros de las plataformas opositoras a Lopera también contactaron ya con Miguel Guillén al objeto de mantener un encuentro con él. Aunque el actual presidente del Betis, un tanto con las manos atadas hasta saber quién será la nueva cabeza visible impuesta por Alaya, pocas cuentas puede rendir a los demandantes.

Con todo, éstos quieren avanzarle alguna de las ideas que tienen de cómo debería, según la opinión consensuada entre ellos, articularse el nuevo Betis. Quizá el principal problema resida en dar con una persona bética, conocedora del mundo del fútbol y que, más allá de su cualificación profesional, tenga la capacidad de soportar el día a día de la entidad. Aunque la elección de ese profesional no tendría por qué recaer en el presidente y sí, quizá, en el administrador judicial.

Junta Extraordinaria

PNB, que ya anunció al negarle Bosch incluir un punto en el orden del día de la Junta Ordinaria, que solicitaría una Extraordinaria, lo hizo ayer mismo, con la adhesión de BxV. "El motivo principal es la preocupación existente en torno a la Fundación del Real Betis, un ente creado por un consejo transitorio que está compuesto por miembros permanentes, algo del todo ilógico. La intención de PNB es evitar que, en caso de que las acciones judicializadas regresaran al club, éstas fueran a parar a manos de un grupo concreto de personas, ya que la postura de la Asociación ha sido siempre que dichas acciones estuvieran en poder de los socios y que fueran ellos los que tuvieran capacidad de mandar sobre el paquete mayoritario para democratizar el club y lograr un Betis de los béticos", indican en su nota. Lógicamente, exigirán "la fiscalización exhaustiva de las cuentas de la entidad", como también anunciaron al no detallar Bosch los gastos externos del club, y a la par ésta servirá, seguramente, para la conformación del nuevo consejo bético.

Farusa debe participar por ley en la elección del administrador judicial

Dos juristas consultados por este diario sobre el nombramiento de un nuevo administrador judicial consideran que sería "ilegal" si éste se hace a espaldas de Farusa, propietaria del 51,34% de las acciones que controlaría. "La designación a dedo por un juez es absolutamente ilegal desde la promulgación de la Ley 1/2000, de 7 de enero, de Enjuiciamiento Civil", según sostiene uno de los abogados. Ésta, en su artículo 631, dice: "Para constituir la administración judicial, se citará de comparecencia ante el Secretario judicial encargado de la ejecución a las partes y, en su caso, a los administradores de las sociedades, cuando éstas no sean la parte ejecutada, así como a los socios o partícipes cuyas acciones o participaciones no se hayan embargado, a fin de que lleguen a un acuerdo o efectúen las alegaciones y prueba oportunas sobre el nombramiento de administrador, persona que deba desempeñar tal cargo, exigencia o no de caución, forma de actuación, mantenimiento o no de la administración preexistente, rendición de cuentas y retribución procedente". El artículo 632 reza así: "Cuando sustituya a los administradores preexistentes y no se disponga otra cosa, los derechos, obligaciones, facultades y responsabilidades del administrador judicial serán los que correspondan con carácter ordinario a los sustituidos...". Es decir, la juez debería citar a los administradores de Farusa y del Betis e intentar consensuar un administrador; de no conseguirlo, se celebra una vista con prueba, en la que se establece el perfil, las atribuciones y poderes, la retribución, y los periodos de rendición de cuentas de su gestión, algo que Bosch dejó pronto de hacer ante Mercedes Alaya.