Gameiro acaba de concluir la mejor temporada de su larga trayectoria. Además de ser la referencia absoluta del ataque del Sevilla, se ha proclamado campeón de la Liga Europa y subcampeón de la Copa del Rey tras haber marcado su tope de goles: 29 tantos en 52 partidos oficiales (3.571 minutos), superando así a Carlos Bacca, el hombre que sólo le dejó un protagonismo parcial en sus dos campañas anteriores como sevillista. El delantero francés ha marcado sus topes en la Liga, con 16 tantos, y la Liga Europa, con 8, y además ha marcado en la Supercopa de Europa, la Copa del Rey (3) y la Champions. Ha hecho goles en todas las competiciones que ha disputado el Sevilla. En contrapartida, su tirón internacional ha crecido mucho.

El futbolista concluyó en la mañana de ayer su concentración con la selección francesa en Clairefontaine. Era uno de los reservas y, de momento, está ya de vacaciones tras ser liberado por Didier Deschamps, quien sólo envió algunas recomendaciones por si tiene que llamar a alguno de estos reservas antes de la Eurocopa: que sean profesionales y que "no se vayan al otro lado del mundo". Pero lo cierto es que Gameiro ya tiene tiempo para relajarse y disfrutar del merecido descanso con su familia. Quizá sea la hora de que el Sevilla retome los contactos con su agente para su renovación, aunque no hay prisa y ésta se dejará para la vuelta al trabajo. Su contrato es vigente hasta 2018.

Que no esté en la Eurocopa es un alivio para el Sevilla en parte, aunque su gran temporada, asentándose entre los diez mejores goleadores de la historia del Sevilla al igualar con 67 a Scotta y Diéguez, invita al club a no relajarse. Es uno de los intocables y la mejor manera de evitar cantos de sirena es una renovación.