El posible adiós de Kondogbia se antoja como la probable pérdida de uno de los jugadores con más potencial del equipo por sus condiciones y su juventud, pero las necesidades del equipo de Unai Emery podrían favorecer a que su salida desemboque en un marco favorable para el Sevilla.

No titubeó Monchi al hacer referencia al asunto en la tarde del jueves durante la presentación de Gameiro como nuevo jugador del Sevilla. "No hay nada para que el jugador salga". Sin embargo, un mes antes el director deportiva hizo hincapié en una oferta de un club español por el medio centro galo. A partir de ahí, todo queda abierto a las posibles exigencias del club y del comprador. Carlo Ancelotti, nuevo técnico del Real Madrid, sería el gran protagonista al pedir a su club la llegada del medio. Un hipotético preacuerdo de quince millones de euros dejaría en el Sevilla el 50% de esa cantidad al tener la mitad de los derechos el Grupo Doyen. El futbolista no pondría inconvenientes a su marcha al Real Madrid, aunque ambos clubes también estudiarían la opción de que permanezca cedido durante esta temporada en el Sevilla.

Su posible marcha coincide con las palabras de Monchi sobre un mercado abierto en el que quizás el Sevilla no haya dado aún su última palabra. "Es un rumor fruto de su excelente rendimiento con nosotros y con la selección sub 20", aclaraba Monchi sobre la hipotética oferta del Madrid.

"Con las salidas y las entradas de jugadores, el objetivo es estabilizar al Sevilla en la parte alta de la clasificación. No debería haber ninguna incorporación más si no sale ningún jugador, pero todavía quedan 35 días de mercado y siempre tenemos la puerta abierta". Fueron las palabras del propio Monchi durante la presentación de Gameiro y esas variantes se abrirían de nuevo si Kondogbia deja la disciplina sevillista. Turno para que el club sepa cuáles son las mayores necesidades y dictamine la coherencia de esa salida.

Los amistosos de verano disputados por el Sevilla, sobre todo los jugados en Sudamérica ante equipos más rodados, dejaron entrever ciertas carencias en la faceta de destrucción en el centro del campo. A sabiendas de que Kondogbia no es el medio de cierre que algunos quisieron inventar en cierta fase de la última temporada, el club sevillista no descarta la opción de incorporar a un medio que pueda aportar cualidades ahora inexistentes en el resto de las piezas. Un hipotético adiós del ex del Lens posibilitaría la capacidad de asumir de nuevo el gasto de un fichaje para esta posición, la que más preocupa en estos momentos al técnico Unai Emery, que ya puso en su lista de descartes al propio Maduro, el único que quizás cumple con esta faceta de ser un medio centro de destrucción.

No en vano, Emery es consciente de que posee medios de enorme polivalencia, aunque ninguno asegure una faceta de cierre clara. Con Medel casi siempre presente en el campo, el técnico sevillista coloca junto a él a un hombre más móvil, por lo que los espacios abundan ya sea Rakitic o el propio Kondogbia los elegidos para acompañar al chileno, que sigue presionando arriba e incorporándose al ataque.

Existen opciones que también favorecen a pensar que no es necesario traer a una nueva pieza que cree competencia. Fazio y el propio Carriço pueden ocupar la posición de medio centro de cierre por sus condiciones físicas y sus cualidades técnicas, aunque el técnico prefiere contar con ambos para disputar algunas de las plazas del centro de la defensa.

Sin encontrar salida aún a Maduro, no es descartable que el holandés se quede y pelee por un sitio en el once pese a ser descartado hace unas semanas. El gran número de medios atacantes también dificulta a Emery el jugar con piezas que pueden complementarse en vez de anularse.

Con Kondogbia o sin él, la gran carencia del juego mostrado hasta el momento es la ausencia de una pieza que equilibre al conjunto.