La afición bética tenía hambre de fútbol y, aunque sólo acudieron poco más de 10.000 espectadores al Benito Villamarín, la grada disfrutó con el buen juego de su equipo y, sobre todo, con el estreno de Roque Santa Cruz, aplaudido desde que Pepe Mel le ordenó calentar. El paraguayo, aún lejos de su mejor estado físico, sí mostró parte de su repertorio e incluso pudo anotar al errar en el remate tras un pase de Juanma o una media vuelta en la que su disparo careció de fuerza. Santa Cruz, eso sí, habilitó a Ezequiel en el cuarto tanto verdiblanco, bien aprovechado por el canterano para reivindicarse como luego en el quinto, donde contó con la colaboración del meta Henderson, a quien se le escurrió el balón.

Mel se tomó la prueba con seriedad, al menos así lo demostró con su el once que dispuso sobre el césped, el mismo que jugase en Granada con las entradas de Amaya y Matilla por los tocados Mario y Beñat. Y el Betis mantuvo la identidad que el técnico trata de imponer hasta en los entrenamientos, con la presión adelantada para recuperar rápido la pelota y el posterior buen trato a la misma. Si a esto se le añade la inferioridad del rival, que milita en la Championship y, además, apareció con algunos no habituales, el vendaval bético se plasmó desde el inicio.

A los dos minutos, una recuperación de Matilla, quien pareció con mejor tono físico que durante la pretemporada, acabó en una galopada de Jefferson Montero que cedió a Rubén Castro para que éste se sacara un disparo inapelable desde la frontal. En un suspiro, el Betis puso tierra de por medio e incluso pudo aumentar la cuenta con las arrancadas de Montero, que amargó hasta tal punto al joven Tallack que lo obligó a cambiarse de banda, aunque Rubén se estrelló con el meta Henderson en dos ocasiones.

En el enésimo desborde del ecuatoriano, aprovechando su conexión con el canario, Tallack cometió penalti que sería transformado por Jorge Molina. Tantas arrancadas de Montero, que se encontró con una verdadera autopista por su banda, facilitaron que el extremo pusiera un buen broche a su partido con un disparo con la derecha que golpeó en el poste antes de convertirse en el tercer gol.

Del Portsmouth nada que decir. El conjunto inglés se parapetó sobre su propio campo para evitar una goleada ante la incapacidad para jugar la pelota. La diferencia de categoría se notó tanto en el trato del balón como en el apartado físico, en el que Betis demostró un punto más que su rival. Únicamente en los minutos finales estiró sus líneas, lo que le valió para anotar el gol del honor.

Tras el descanso, Mel aprovechó para realizar el carrusel de cambios, dejando únicamente a Amaya, Matilla y Jorge Molina del equipo inicial, por aquello de que adquiriesen los minutos que les faltó en pretemporada. La propuesta verdiblanca continuó siendo la misma y, aunque el Betis perdió algo de fluidez en la circulación de la pelota, sí llegó una y otra vez a las cercanías de Henderson. Y es que jugadores como Jonathan Pereira o el mencionada anteriormente Ezequiel pretendieron hacerle ver a Mel que puede contar con ellos cuando sea necesario. Especialmente activo se mostró el canterano, quien se perdió la pretemporada por su presencia en el Mundial sub 20 y que quiere recuperar el terreno perdido cuanto antes. Suyos fueron los dos goles con los que el Betis completó la manita e incluso con sus desbordes pudo provocar alguno más.

Con todo, del duelo apenas se pueden extraer conclusiones para el campeonato liguero, aunque los béticos sí pudieron comprobar por vez primera en Heliópolis el rendimiento de seis de los nueve fichajes realizados -Tosic estuvo en el palco y Mario y Fabricio están lesionados-, aunque a Amaya y Ustaritz apenas se les pudo valorar ante la inoperancia en ataque del cuadro inglés.

Los diez mil valientes que acudieron al Villamarín se fueron satisfechos con el rendimiento de su equipo, pese a la debilidad del rival, y, sobre todo, podrán contar que presenciaron en directo el estreno de Santa Cruz, el fichaje estrella del Betis y en quien se tiene depositadas muchas esperanzas para que se dé ese salto de calidad que permita asentarse en la máxima categoría.

Betis: Casto; Chica, Amaya, Dorado, Nacho; Iriney, Matilla, Salva Sevilla; Rubén Castro, Jorge Molina y Jefferson Montero. También jugaron: Goitia, Juanma, Ustaritz, Isidoro, Cañas, Momo, Jonathan Pereira, Ezequiel y Santa Cruz  

Portsmouth: Henderson; Tallack, Halford, Pearce, Ricardo Rocha; Ward, Norris; Stockford, Varney, Kitson; y Williams. También jugaron: Magri, Webster y Ashdown.  Goles: 1-0 (2') Rubén Castro. 2-0 (18') Jorge Molina, de penalti. 3-0 (27') Jefferson Montero. 4-0 (67') Ezequiel. 5-0 (79') Ezequiel. 5-1 (90') Varney.

Árbitro: Pérez Montero (andaluz). Amonestó a Jorge Molina y Ward.