Después de cinco exitosas campañas en LEB Plata, donde hizo del Alameda un fortín en el que cada partido era una batalla, el Baloncesto Morón solicitará su inscripción en la liga EBA la próxima campaña al no reunir los apoyos económicos suficientes, por lo que "el club se ve, lamentablemente, obligado a descender de categoría", apunta la entidad.

No es un descenso, ya que los mismos se anularon este curso en la LEB Plata por la cancelación de la liga por la pandemia, sino una renuncia por las grave crisis económica derivada del coronavirus. Tras haber pedido ya el año anterior a Aceitunas Fragata como su principal patrocinador, el equipo aruncitano salió en LEB Plata y tenía a tiro sellar la salvación de nuevo en una temporada algo irregular.

"Nos ha faltado un poco, pero no ha podido ser. La renuncia a continuar en la categoría que nos corresponde y que nos hemos ganado en las pistas no es un paso atrás en nuestro compromiso como club. Seguiremos trabajando con más ahínco si cabe. Gracias a los aficionados, a los que le pedimos perdón por haberles fallado. A todos ellos les hacemos una promesa: volveremos", finaliza el comunicado.

La decisión fue tomada tras la asamblea de socios. Un día antes el Morón anunció que le faltaban aproximadamente 18.000 euros para poder salir en LEB Plata. En esta situación ha sido determinante la imposibilidad de vender abonos cara a la próxima campaña, una cantidad que deja de ingresar y que la pasada temporada entre abonos y entradas era una partida de unos 30.000 euros.

Queda en el aire ahora, por ejemplo, el destino de canteranos béticos Magassa o Rasmus Moller, que iban a ir cedidos al Morón en LEB Plata.