Rugby l Copa FAR

Título con sangre, sudor y lágrimas

  • El Cajasol pasó muchísimos apuros para alzar su duodécimo trofeo andaluz

El duodécimo título de la Copa Andalucía de Rugby bien vale sangre, sudor y lágrimas, excesivos castigos para el Cajasol Ciencias, quizás, analizando la entidad del adversario, un Atlético Portuense que está una categoría por debajo de los hispalenses pero que no lo demostró en los 80 minutos de juego. Con sangre terminó Hattori, sudorosos todos y dolorido a rabiar Carlitos Arenas, que tuvo que abandonar el campo lesionado con una pequeña fractura en el peroné.

Quien pensara que la final iba a ser coser y cantar para el quince de Arenas se equivocaba de todas todas. La hinchada portuense no viajó en balde, pues disfrutó con su equipo desde el inicio hasta el final. Hasta el 22-18 definitivo pasaron muchas circunstancias, incluida la de ver a los gaditanos por delante nada más arrancar la contienda. De la Cueva estuvo fino con la patada en la primera parte y se desfondó por completo luego, pudiendo dar de forma inesperada la victoria al Atlético Portuense si no llega a malgastar varios tiros a palos, en concreto tres golpes y una transformación.

Con la premura del 0-3 despertó el conjunto de Arenas y 10 minutos más tarde ya tenía dos ensayos que vislumbraban que el marcador sería abultado a favor de sus intereses. Nada más lejos de la realidad. Después de las marcas de Corey Smith y de Bobby Nave -éste tras una espectacular galopada con eslalon del fidjiano, que acabó posando el balón bajo palos-, la tranquilidad para los sevillanos dejó de reinar.

Y eso que a otro golpe de De la Cueva le siguió una marca más transformación del Ciencias: 19-6, minuto 25. La sanción de 10 minutos a Ledesma por antijuego al borde del descanso costó siete puntos en contra con la marca de Durán más los dos puntos de propina de De la Cueva.

En la segunda parte hubo sufrimiento. El Cajasol empezó fuerte (22-13, tras un golpe de Gibson) y no se sabe por qué se diluyó, flaqueó y la delantera fue arrollada por la del Portuense, que ensayó a falta de 10 minutos (22-18), pero De la Cueva desperdició la patada para dejar el título a un golpe de castigo y tiempo por jugar.

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