Joan Plaza habló sobre la situación del Coosur Betis, antes de jugar contra el San Pablo Burgos este jueves (18:30), en esta recta final del curso, que afronta con tres triunfos de ventaja sobre el descenso quedando cinco jornadas. Aun así, insiste el técnico en que sólo piensan que les "faltan dos triunfos" y que le "disgustaría bastante que hubiera gente abriendo botellas de cava para celebrar algo que aún no se ha producido".

Cree el técnico que el equipo ha alcanzado una "madurez paulatina que te da el tiempo, el conocimiento de los jugadores, del entrenador, las dinámicas...". "Ahora es fácil decirlo después de haber ganado algunos partidos, pero hay que refrendarlo día a día y qué mejor que hacerlo que contra Burgos, un conjunto muy difícil y que ha ganado la FIBA Champions este mismo año para que esa madurez se plasme en el partido".

Sobre el paso adelante dado por el cuadro sevillano indicó también: "Hay entrenadores y equipos que son diésel, otros gasolina y ahora hasta híbridos. Unos jugadores entienden con la mirada lo que les dices, otros necesitan un café y otros una cena. Como seres humanos, a veces se necesita más tiempo para ensamblar esos conocimientos y ahora los jugadores  cometen menos errores. Es un tema general del conocimiento y las cosas después de cocerlas están mejor", destacó el catalán, que no quiere euforias aún: "Nos faltan dos triunfos. Hemos hecho cosas muy interesantes y nunca es fácil ganar en canchas como las del Joventut o Estudiantes. Pero para nosotros es muy importante no vivir de rentas y lo que hicimos en el pasado sino enfocarnos en lo que tenemos delante. Vivir el aquí y el ahora es para mí vital".

"No permito que mi entorno, ni laboral ni personal me haga ver nada más allá del próximo partido"

Sobre el rival destacó que cuenta con "una plantilla muy compensada" y que "tiene mucho mérito su campaña con lesionados y problemas con el coronavirus". "Están en una posición privilegiada y dando una sensación de madurez muy grande que viene de años atrás y que han ido mejorando. Es un equipo difícil de batir. Centrarnos en ser competitivos, no cometer errores e ir con hambre de ganar para merecernos la victoria", apuntó, consciente de que "para ganar a equipos en play off hay que hacerlo todo bien". "Desde un punto de vista de porcentajes hemos de elevar el de los últimos días y defensivamente estar ordenados atrás sabiendo de la polivalencia de sus jugadores, con pívots capaces de tirar de tres puntos y bases que pueden postear. Tienen quizá la mejor pareja de tiradores de la liga, son difíciles de parar e incluso juegan juntos a veces. Los bases tienen muchos puntos en las manos y cuentan con mucha experiencia en sus jugadores", explicó.

Plaza indicó que no ha captado euforia en el vestuario tras los últimos resultados. "He de confesar que en el vestuario no lo he notado. No sé si son grandes actores, pero en mí nadie habrá visto alguien que esté saboreando nada. Me disgustaría bastante que hubiera gente abriendo botellas de cava para celebrar algo que aún no se ha producido. No va con mi carácter ni mi manera de pensar. Hasta que no sea matemático hay que seguir peleando y dejarnos la piel por salvarnos".

Dice Plaza que el desacierto desde el triple no le quita el sueño. "Todos los entrenadores queremos tener buenos porcentajes y el baloncesto actual gira en tener cuatro tiradores en pista, como Burgos, pero estoy contento con la plantilla. Son las herramientas que me han dado y los jugadores que podían tirar mejor de tres lo compensan siendo muy estrictos en el rebote, sólidos en defensa, valorando cada balón perdido... Estoy aquí para sacar su mejor rendimiento y procurando que sean felices con el estilo de juego que les propongo", indicó Plaza, que insistió en que "es el tiempo el que acaba dotando a los jugadores de ese conocimiento". "Randle, en su caso, ha sido por tema físico. Todos queremos acelerar procesos y no es fácil volver tras una lesión de nueve meses o la misma integración de Jerome Jordan los momentos que está en pista. Almazán, por ejemplo, está encontrando bastantes tiros con altos porcentajes porque ahora sabe dónde están sus compañeros y donde puede recibir balones". 

"Ahora mismo vivo en el aquí y ahora más que nunca. No permito que mi entorno, ni laboral ni personal me haga ver nada más allá del próximo partido. No he visto al Manresa aún y no lo haré hasta que volvamos de Burgos".