No debe ser fácil vivir una pandemia en un país que no es el tuyo, lejos de familiares y amigos y tener que dejar a un lado de tu actividad diaria, el baloncesto. A Kenan Sipahi, además, todo esto le llegó en un mal momento deportivo, relegado al banquillo para hacerle hueco a Green, que reactivó desde su llegada al Coosur Real Betis. Ahora pasa el confinamiento acompañado, haciendo deporte y viendo películas y series, esperando que todo vuelva a la normalidad para seguir mejorando, consciente de lo que debe pulir, y con ganas de seguir vistiendo de verdiblanco la próxima temporada.

"Estoy bien, los primeros días fueron más difíciles, pero estar con mi pareja lo hace todo mucho más fácil", explica el turco, que está siendo "bueno tratando de no salir de casa, excepto para ir a la compras y haciendo ejercicio. El resto del tiempo lo paso viendo películas y series y ayudando en la casa. Me gustó lavar el balcón". Una vida a la que un deportista profesional no está acostumbrado, "por lo que se hace complicado, sobre todo comer menos al estar todo el día encerrados".

Sipahi, que ha visto cómo evolucionaba la crisis sanitaria en España, cree que en Turquía, donde siguieron los partidos a puerta cerrada, las medidas llegaron "un poco tarde", aunque ahora todo "está bien". "Creo que los jugadores estaban incómodos jugando. Deberían haberlos escuchado, porque son los actores principales de este deporte. La situación allí es mucho mejor ahora. El ministro de Salud está haciendo un trabajo increíble, pero parece que los casos crecerán con el tiempo. Estoy preocupado por mi familia, como todos, porque tenerlos lejos de mí con este panorama es difícil".

En algún momento, espera, volverá la normalidad y la liga retomará su camino. "Estaba disfrutando mucho de la temporada, especialmente las últimas semanas en las que conseguimos buenos resultados. Estar en Sevilla en mi primer año en el extranjero es increíble", afirma el base, que sigue acostumbrándose a un nuevo estilo de juego: "Esta temporada jugué totalmente diferente a los últimos dos años, tratando de contribuir mucho en el ataque, asumiendo más responsabilidades y mejorando. Hay muchas cosas que tengo que mejorar, comenzando por el tiro exterior y la capacidad de sumar en el uno contra uno".

De titularísimo, Sipahi vio reducido drásticamente su protagonismo, "lo que fue un poco difícil de entender", porque creía que "estaba haciendo un buen trabajo". "Pero lo acepto. Estoy tratando de hacer lo mejor para el equipo y si al final ganamos eso es lo importante", apunta el otomano, que recuerda que "la razón más importante para venir al Betis fue tener un papel y minutos de juego. No hay ningún jugador que quiera jugar menos". Pese a todo, la próxima campaña desea "continuar en el Betis". "Trabajaré duro en verano y ayudaré a comenzar mejor la próxima temporada para mirar a los play off".