Respeto, sí; miedo, no. Ése es el sentimiento que tiene el vestuario ante la visita del Barcelona y Adriano Correia, uno de los jugadores que más destacan por su optimismo, recuerda que el Sánchez-Pizjuán acogerá un gran partido. "Están en un momento dulce, increíble, pero nosotros pensamos en nosotros, en sacar nuestro nivel de fútbol. Estamos volviendo al nivel que queremos y tenemos muchas ganas", dijo el brasileño, que recordó que el Barcelona "siempre juega a lo suyo, a querer ganar y a meter goles. Nosotros queremos jugar como ellos y del centro del campo hacia delante hacer lo que sabemos".

El de Coritiba no desdeña el papel que puede hacer el Sevilla ante el líder: "Estamos peleando con los grandes y este partido no lo podemos dejar escapar. Ya se nos han ido dos puntos con el Valencia".

Adriano fue preguntado por el regreso de un amigo como es Daniel Alves y por si habían bromeado por teléfono sobre el partido. "Yo no he hablado con él, ni Renato tampoco. Luis ha hablado en la selección, pero esta semana todavía no. Va a ser un gran duelo, un duelo de titanes, como decimos en Brasil. Seguro que yo y él vamos a disfrutar un montón. Es un grandísimo jugador y para mí es el mejor lateral que hay en el fútbol", precisó el extremo zurdo, un hombre que se pone a las órdenes de Jiménez en el caso de que decida colocarlo en la derecha por la baja de Jesús Navas y que ve su renovación a la vuelta de la esquina. "Mi representante llega el sábado por la mañana, verá el partido y el martes tiene pensado cerrar el tema. Estamos cerca, estoy a gusto aquí en el Sevilla y es el club que me ha abierto las puertas y un gran escaparate para mí", dijo.