La Unión Deportiva Soleá comenzó el año nuevo con un triunfo que vuelve a alentar las ilusiones de alcanzar las cotas del ascenso. El recuento de puntos habla de un Soleá al que únicamente le falta que los equipos de arriba, Torreblanca, Diablos Rojos y La Barrera, pinchen en sus compromisos venidero. Así lo hizo el pasado viernes La Barrera ante el Pedrera.

El Soleá, en cambio, no falló. La primera mitad fue entera del equipo local, tanto que el 1-0 con el que se llegó al final de los 45 primeros minutos resultó corto a vista de todos. El tanto inicial de Lele, en el minuto 5, puso el encuentro de cara para el conjunto del Polígono de San Pablo. De manera inesperada, el Viso se vio con que el adversario le cedía el peso de la construcción del juego y el control de esférico, circunstancia que echaba por tierra los planes iniciales de los visueños.

Con el marcador a favor y el paso de los minutos de aliado, el Soleá se mantenía expectante en su propio campo. El Viso trataba de asumir el sobrevenido rol de atacante sin demasiado éxito y el once local esperaba al acecho un error rival, que fuera llegando a medida que el equipo del Alcor iba rindiéndose de maduro.

El minuto 75 fue el del 2-0 local, pudiendo el Soleá haber anotado anteriormente en múltiples ocasiones, lo que evitó el espléndido recital de paradas con el que Antonio I, portero del Viso, que salvó a su equipo de una abultada goleada. El Soleá, con todo a su favor, pasó a una fase en la que la inercia de la clara victoria propició la relajación. Una relajación ni siquiera alterada por el postrero gol del visitante Juan. El tiempo de descuento no dio para más.