José María Múgica, uno de los hijos del dirigente socialista Fernando Múgica asesinado hace 22 años en San Sebastián, hizo ayer un llamamiento a combatir el legado de odio del terrorismo de ETA "en las instituciones, a través de la ley y en las escuelas, construyendo la historia de su derrota".

José María Múgica hizo esta invocación durante la ofrenda floral que anualmente su familia organiza en memoria del histórico dirigente socialista en el cementerio de Polloe y que en esta ocasión contó con la asistencia del ex primer ministro de Francia Manuel Valls, distinguido el sábado en San Sebastián con el premio Gregorio Ordóñez 2017. Adolfo Suárez Illana, hijo del ex presidente español Adolfo Suárez; la secretaria general del PSE/EE, Idoia Mendia; el alcalde de San Sebastián, Eneko Goia (PNV), y el consejero de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda del Gobierno Vasco, el socialista Iñaki Arriola, fueron otros de los asistentes al acto.

Durante su intervención, José María Múgica recordó que "gracias a la acción policial, judicial y la colaboración internacional" se ha conseguido la derrota del terrorismo y que en el País Vasco "ya nadie asesine a nadie". A pesar de ello, precisó que, después de "décadas de sufrimiento", los demócratas aún siguen en el mismo "combate" para lograr derrotar definitivamente "su legado".