Podemos ha pedido a la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, que dimita "por dignidad" al entender que lo que ha hecho el juez del Supremo Manuel Marchena como lo que ha "perpetrado" Batet al retirar el escaño al diputado morado Alberto Rodríguez "atenta contra la democracia y la separación de poderes".

Es algo "gravísimo", han coincidido en calificar los portavoces de Podemos, Isa Serra y Pablo Fernández, en una rueda de prensa en la sede de la formación en el marco del choque entre los dos socios del Gobierno a cuenta de la retirada del acta a Rodríguez y sobre quién debe dirigir el proceso para derogar la reforma laboral.

A la petición de que dimita Batet se ha sumado también el ex secretario general de Podemos Pablo Iglesias al opinar que es una "barbaridad" que hayan dejado sin escaño a Rodríguez.

Las dos fuerzas del Ejecutivo mantienen este pulso a pocas horas de que se inicie la reunión de seguimiento del pacto del gobierno de coalición que Unidas Podemos pidió el viernes a raíz de las discrepancias surgidas por el rechazo de los morados a que sea la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, quien lidere la negociación para acabar con la reforma laboral del PP en lugar de que lo haga la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.

De hecho, Serra ha dejado claro que no van a permitir que Calviño haga una reforma laboral "al servicio y a la medida de la patronal" que es lo que se temen si ella se pone al frente de la negociación y ha insistido en que la ministra de Trabajo está haciendo "enormes esfuerzos" para derogarla, pero hay resistencias en la parte socialista del Ejecutivo.

Y de la reunión de esta tarde, que ha sido convocada en el Congreso a partir de las 6 de la tarde y a la que no asistirá Yolanda Díaz, Serra ha confiado en que sirva para que el PSOE cumpla el acuerdo, recordando que Calviño siempre ha sido contraria a derogar la reforma del mercado de trabajo y por eso "quizá no es la más indicada para pilotar este proceso".

Respecto al encontronazo que han tenido con Batet por la retirada del escaño a su diputado, Serra ha subrayado que lo que se ha producido "no es un ataque a Alberto o a Unidas Podemos, es un ataque a la democracia, al legislativo y a la voluntad popular. Es una condena injusta basada en acusaciones falsas".

Marchena, en colaboración con Batet, ha acusado Serra, han arrebatado el escaño a Alberto Rodríguez contra el criterio de los letrados del Congreso y del propio Supremo, "y eso es gravísimo".

Pese a que el viernes Podemos anunció una querella contra Batet por prevaricación, una acusación que extendió al Supremo, ahora aseguran que es una cuestión que atañe a Rodríguez: "en un principio manifestó su voluntad de querellarse contra Batet, pero si ahora tiene una estrategia jurídica distinta, nosotros le respaldamos", ha dicho Pablo Fernández.

"Nosotros nunca dijimos que la querella la iba a presentar Unidas Podemos, desde el primer momento dijimos que íbamos a apoyar a Alberto", ha recalcado el portavoz negando haber cambiado de criterio y después de que el sábado el ministro de Consumo, Alberto Garzón, precisara que la querella la presentaba el diputado morado a título personal, quien ayer finalmente dijo que no lo haría y que además dejaba el partido.

Serra ha repetido que la decisión de querellarse contra Batet era de Rodríguez y que de ello tuvieron conocimiento toda la cúpula de Unidas Podemos y los 35 diputados del grupo parlamentario. EF