Semak, el capitán sorpresa

El técnico Guus Hiddink sorprendió al convocar a Sergei Semak para integrar la lista de 23 de la selección de Rusia, en la que no figuraba en los últimos dos años, pero el volante, que se hizo capitán, le 'pagó' esa confianza con el fuerte liderazgo que muestra en esta Eurocopa.

Con 32 años, todo un veterano dentro del equipo más joven en el torneo de Suiza y Austria, Semak se convirtió en la primera gran sorpresa de esta convocatoria, dentro de un equipo que se había clasificado sin él para la Eurocopa.

En mayo de 2006 había sido la última vez que se puso la casaca de la selección. Por eso, la sorpresa fue mayor cuando Hiddink enseguida le confió el brazalete de capitán del equipo en los partidos preparativos para la Eurocopa.

"La confianza del entrenador, que me invitó al equipo para esta competencia, para mí es un gran placer", confió recientemente al sitio de la UEFA.

"Eso no le sucede a todo el mundo, una ocasión así. Pero encima que me haya designado capitán de inmediato, es más sorprendente", acotó.

El centrocampista del FC Rubin Kazán (720 km al este de Moscú, Tartastán), ya ha dejado su marca en este torneo, con dos asistencias, una contra Grecia (1-0) y otra para el primer gol ante Holanda, en los cuartos de final (3-1 en alargue).

Para Semak, este proceso es una especie de renacimiento internacional, ya que casi todo el mundo se había olvidado de la tripleta que le clavó al París SG en el Parque de los Príncipes con la casaca del CSKA Moscú, en la Liga de Campeones de 2004.

El club parisino enseguida lo compró, pero el ruso jamás pudo imponerse en tierra gala y se volvió a Rusia.

Contra España, en la semifinal del jueves en Viena, Semak ni menciona las palabras venganza o revancha, tras la goleada sufrida en la primera ronda (4-1) contra la Furia Roja.

"La razón principal de esa derrota fueron los errores individuales, y con el 2-0 fue mucho más fácil jugar para ellos", dijo este gran admirador del punta español Fernando Torres.

Para Semak, la razón de la recuperación de Rusia después de ese cachetazo del debut se basa en "nuestra buena condición física, el calor no nos afecta tanto", al tiempo que admira que su seleccionador no haya cambiado mucho después del paso en falso contra la Furia Roja.

"No ha cambiado su estilo en comparación con el partido ante España. Se ha seguido jugando de la misma manera, es decir, explotar nuestros puntos fuertes, la velocidad y nuestro movimiento", comentó el capitán sorpresa, quien se puso la cinta que dejó vacante Andrei Arshavin (suspendido) y no la soltó más.