Dicen que las casetas son una prolongación del hogar y la de Sando puede hacer alarde de ello. Con una gran hospitalidad, responsables de esta compañía constructora celebraron ayer un encuentro con periodistas, en un ambiente familiar. El calor, que comenzó a apretar ayer al mediodía en el recinto de Los Remedios, se sobrellevó mucho mejor en buena compañía y con rebujito. Las recurrentes conversaciones sobre la crisis y las dificultades en todos los sectores no frenan las ganas de Feria. Al mal tiempo buena cara.

A pocos pasos de la portada de la Feria, en el número 31 de Antonio Bienvenida, amigos y familiares vinculados a la empresa constructora disfrutaron de una jornada en familia. Precisamente como una familia comenzó Sando a andar en 1974 como una pequeña empresa dedicada a actividades complementarias a la construcción. Casi cuarenta años después esta firma se ha convertido en una de las principales compañías constructora de Andalucía.

Carlos Bueno, Ignacio Romero Boldt, Silvia Martínez, Victoria Torres, Francisca Manzano, Pedro Mejías y Lourdes Fernández compartieron mesa el jueves de Feria. Sin agobios ante un real de agradable paseo, otra mesa de Antonio Bienvenida estuvo ocupada por Eduardo Rodríguez Marañón, Luis Sánchez Manzano, José Luis Guardiola, Mónica Lozano, Helena Pena y José Antonio Vázquez.