Kiko Rivera se encuentra en su casa en Sevilla recuperándose del nuevo susto cardiovascular que le llevó al hospital para ser tratado del corazón. El hijo de Isabel Pantoja necesita cuidados y reposo por ahora. Fue sometido a un cateterismo y eso le va a tener apartado unas semanas de los escenarios cuando tenía previsto centrarse en este verano a la promoción de su último tema, El Mambo, que salió en pleno ingreso.

Tras el ictus sufrido el pasado otoño el hijo de Isabel Pantoja ha estado cuidándose y rebajó el ritmo. Justo cuando iba a retomar las actuaciones ha surgido este nuevo contratiempo. La recaída ha permitido al menos su reconciliación con su madre, que estuvo a su lado en la intervención a la que fue sometido este martes y con su esposa, Irene Rosales, a su lado en todo momento. 

Ha compartido fragmentos de su canción, tras haber anunciado días atrás que "el corazón no le funcionaba en condiciones".

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Ahora toca cuidarse más y tomarse con calma este verano. Kiko está saliendo de casa bien temprano, para esquivar las horas de temperaturas asfixiantes en Sevilla, para una caminata cardiosaludable tal como le ha recomendado el médico.

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Más de media hora con cierta intensidad en el paseo para rebajar el índice de colesterol y evitar problemas de ictus. La evolución de su crisis cardíaca le obliga también a visitas al hospital en próximas semanas antes de recibir el alta definitiva para regresar a su faceta artística y aprovechar el tirón del lanzamiento de El Mambo, donde están las esperanzas de Kiko para ganar en popularidad, lo que necesita tras cerrarse la puerta de Telecinco.