Pedro González-Trevijano, el presidente del Tribunal Constitucional es un hombre de consenso. Así lo definió el doctor López Puerta en la presentación de la conferencia que impartió en la Real Academia Sevillana de medicina y Cirugía como celebración de los 322 años de la institución. Una característica a la que el conferenciante aludió en varias ocasiones durante su discurso para referirse a la Constitución.

González-Trevijano desgranó las características de la Carta Magna de 1978 teniendo en cuenta el contexto histórico, político y los valores a los que respondía, además de la tensión entre la idea de permanencia y el deseo de cambio. Según el presidente del Constitucional, el texto "fue la síntesis política de la transición, un proceso que sirvió para cicatrizar las heridas de la Guerra Civil y su puesta en marcha es lo que hizo que España entrara en la modernidad".

Fiel a su vocación de catedrático, realizó una clase magistral donde, en poco más de media hora hizo un recorrido claro y esquemático por la "convulsa" historia constitucional española. Sobre los cambios de norma fundamental a lo largo del siglo XIX y comienzos del XX, el conferenciante explicó que no estaban tan alejados de lo que ocurría en los países del entorno en esa época, centrándose en el caso de Francia.Según González-Trevijano, la Ley para la Reforma Política “supuso un torpedo en la línea de flotación a los intangibles de las leyes franquistas” con la enunciación expresa del derecho a elecciones libres.

Tras un recorrido por los pasos que llevaron hasta la aprobación "en todos los territorios españoles" de la Constitución, explicó como anécdota que la Carta Magna debía de haber sido sancionada el 28 de diciembre, pero “ante el antecedente de la Pepa, conocida así por haber sido promulgada un 19 de marzo, día de San José, se decidió que la Constitución de 1978 fuera promulgada un día después, el 29 diciembre para no hacerla coincidir con el día a de los Santos Inocentes”.

Una Constitución que es "hija de la transición política y un texto para todos los españoles". El presidente del Tribunal Constitucional explicó que la Carta Magna recoge un "reconocimiento generosísimo de los derechos fundamentales", que están protegidos de un modo "singular, concreto y específico". Es más, su articulado también incluye derechos sociales, económicos y culturales como el de la salud.

Durante esta "visita guiada" por la "norma más importante para un jurista", González-Trevijano recordó que el único de los poderes que aparece en el articulado constitucional denominado así es el judicial. Respecto a la reforma de la constitución, el magistrado recordó que sólo se han realizado dos "de carácter menor": la provocada por el Tratado de Maastrich y la del principio de estabilidad económica. Sobre esta posibilidad aseguró que no tiene duda de que se reformará. Para ello “debe haber un clima de distensión política para poder contar con el mayor respaldo de la ciudadanía, que debe conocer cómo, por qué y para qué se modifica”.