José de la Cruz Bugallal, el magistrado que resolvió en Sevilla las primeras apelaciones a la luz de la Ley del Divorcio de 1981, falleció el pasado 18 de febrero, a los 90 años, y sus compañeros le recordarán con un funeral este miércoles en la iglesia de los Padres Blancos.

José de la Cruz tuvo su primer destino judicial en Órgiva (Granada), luego pasó en 1961 a Chiclana de la Frontera, en 1968 a Lora del Río y ascendió a magistrado en Gerona. Posteriormente fue juez de instrucción en Almería, pasó al juzgado de instrucción 5 de Sevilla y finalmente en 1983 a la Audiencia de Sevilla, donde le tocó resolver las apelaciones por las primeras separaciones y divorcios dictadas en España según la ley de 1981.

Desde 1985 fue presidente de la Sección Segunda, que al principio era sala civil y penal pero bajo su mandato se especializó en asuntos de Familia.

Tenía 90 años y falleció de un edema pulmonar derivado de una displasia de médula. Tiene un hijo abogado, José de la Cruz, y una hija que estudió Derecho.

Fue ponente de la apelación dictada por un pleno de 14 magistrados del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) por la sentencia contra el entonces alcalde de Jerez, Pedro Pacheco, en tanto que aforado, cuando dijo que “la Justicia es un cachondeo”. Sin embargo, el hijo del magistrado recuerda a este periódico que el objeto de la condena no fue esa frase que ha pasado a la historia sino haber acusado de connivencia a abogados y jueces.

Siendo juez en Almería, de la Cruz llevó también un mediático caso contra el dueño de una droguería que incendió su negocio para cobrar el seguro y provocó un siniestro en el que murió una familia, recuerda su hijo.

Damián Álvarez: "Un hombre íntegro, cumplidor y trabajador"

Damián Álvarez, sucesor del fallecido al frente de la Sección Segunda y actual presidente de la Audiencia de Sevilla, declara a este periódico que de la Cruz "era un caballero, hombre íntegro, muy cumplidor y trabajador". 

Por su parte, María Pérez Galván, vicepresidenta de la Asociación Española de Abogados de Familia (AEAFA) destaca a este periódico que José de la Cruz “fue un gran jurista, discreto, respetuoso y agradable siempre con todos los abogados, a los que trataba con una amabilidad especial”.

En el caso de la AEAFA, el magistrado “inauguró hace 25 años las primeras jornadas que organizó la asociación y nos ayudó siempre que lo necesitamos”, resalta.

José de la Cruz (derecha), con María Pérez Galván y Alfredo Flores (izquierda), ex fiscal jefe de Sevilla

Otros abogados de Familia lo recuerdan por su “espíritu de trabajo y ser un hombre de bien”. Tanto él como su esposa estuvieron muy vinculados a asociaciones humanitarias y de ayuda a personas con síndrome de Down.

José de Cruz perteneció a la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), por la que fue candidato frustrado en dos ocasiones a la presidencia de la Audiencia de Sevilla: en 1987, cuando resultó elegido Claudio Movilla, y en 1992 cuando el elegido fue Miguel Carmona, ambos de Jueces para la Democracia.

La APM ha publicado ahora una esquela en la que invita al funeral que se celebrará en la iglesia de los Padres Blancos en la tarde de este miércoles.