Peugeot ha mostrado el Inception Concept en el CES de Las Vegas, un salón de la electrónica en un país en el que, curiosamente, la francesa no vende sus productos: de entre las marcas europeas de Stellantis, sólo Alfa Romeo, Fiat y Maserati hacen acto de presencia en el segundo mercado de automóviles del mundo, tras China. El resto del grupo industrial allí son Chrysler, Dodge, Jeep y RAM.

Como su propio nombre indica, es un concept-car lejos de la realidad productiva pero que adelanta muchos rasgos que veremos en un futuro próximo en modelos. Es el caso del frontal al que la marca llama “the fusion mask” y que, además de una firma de luz con las tres garras tan comunes en los pilotos traseros de los Peugeot en lugar del colmillo lumínico, utiliza una parrilla con un cristal bajo el que se sitúan todos los sensores necesarios para la conducción. De hecho, Peugeot no esconde que “este manifiesto -que es como denomina a sus show-car- inspirará los futuros productos de la marca, hasta los modelos más compactos de la gama, a partir de 2025”. Así pues, un frontal como éste será el que utilicen los futuros Peugeot, de manera análoga al Opel Vizor de la marca alemana, con el futuro 2008 como el primero de la familia con él.

Uno de los rasgos característicos del Inception Concept es su gran superficie acristalada. Tiene recursos originales, como la barra que recorre lateralmente el coche y que, además de mensajes como los de bienvenida, puede aportar datos sobre la carga de la batería.

Según Linda Jackson, CEO de Peugeot, “en 2023 el ciento por ciento de los vehículos de la gama se electrificarán, y en los próximos dos años se lanzarán cinco nuevos modelos eléctricos al ciento por ciento. Nuestra ambición es sencilla: hacer de Peugeot la marca eléctrica líder en Europa para 2030. Esta visión objetiva y ambiciosa allana el camino para una transformación radical de la marca. Hoy está plasmado en el Peugeot Inception Concept, que marca el comienzo de una nueva era”

Se utiliza para este concept-car una plataforma específicamente eléctrica, la STLA Largue. Estas bases empezarán en breve a usarse en coches de producción de Stellantis.

El Inception Concept es el primer coche diseñado íntegramente por el equipo ya dirigido por Matthias Hossan, quien estuviera tras el Citroën Metrópolis presentado en 2010 y que reemplaza a Gilles Vidal, director de estilo de Peugeot entre 2010 y 2020, año éste en el que fichó por Renault. Está diseñado a partir de la plataforma específicamente eléctrica de mayor tamaño de Stellantis, la STLA Large.

Esta forma parte de un grupo de cuatro bases que se lanzarán en vehículos de producción a partir de 2023 y que, en este caso, le permite disponer de una longitud récord para un turismo de Peugeot de 5 metros: entre los coches de producción, hoy el 508 mide 4,75 m, mientras que el de mayor tamaño, que ya no está a la venta, fue el 607 con 4,92 m. También es considerablemente baja, con 1,34 m, de manera que sus dimensiones se asemejan a las de un BMW Serie 8 Gran Coupé. Como éste, el Inception tiene cuatro puerta, aunque delanteras y traseras se abren en sentidos opuestos.

En todo caso, su silueta en cierto modo recuerda más que a las berlinas a coupés como los 406 Coupé desarrollados y producidos por Pininfarina a partir de 1996, un tipo de coche que no es frecuente en la gama de Peugeot, aunque sí ha contado con este tipo de carrocería, además de en ese 406, en los 504, RCZ, 407… y, por supuesto, es muchísimo más usual entre los concept-car. Es el caso, entre otros, del 407 Prologue, pero también del Onyx, el e-Legend de 2018…

Del 408 el Inception Concept no sólo recibe las llantas, sino que también esa característica inclinación de la trasera, si bien en el coche de producción apenas se insinúa.

La superficie acristalada del Inception es de 7,25 m2 y llama la atención el enorme parabrisas, tan grande que deja prácticamente el capó reducido a una insinuación. Se utiliza un vidrio denominado Narima, también para el techo solar, mientras que en la trasera se opta por un sesgo inclinado que, en cierto modo, ya hemos visto recientemente insinuado en un Peugeot: en el 408.

Las marcas de las garras del león se mantienen en los pilotos traseros y pasan, ahora, también al frontal.

El Inception tiene una arquitectura eléctrica de 800 voltios, con una batería de 100 kWh. Esta capacidad le permite recorrer 800 km con una sola carga en tanto que la estimación de consumo que para él realiza Peugeot es de 12,5 kWh/100 km. Disponer de esos 800 voltios le permite recibir en un cargador ultrarrápido de energía suficiente para recorrer 30 kilómetros en sólo un minuto o 150 en cinco pero es que, además de usar para ello un cable, el Inception también puede recibir energía -probablemente no esas potencias máximas anunciadas- por inducción.

La STLA Largue permite situar un motor por eje, de modo que este Peugeot cuente con tracción total, y una potencia máxima de 500 kW (680 CV), de modo que la aceleración de 0 a 100 km/h se resuelva en 3 segundos.

El concepto del i-Cockpit actual de Peugeot se renueva. En el futuro, el salpicadero desaparecerá y, en unos años, los volantes rectangulares llegarán a los coches de producción de la marca.

También permite contar con una dirección by-Wire, lo que lleva a que el volante ya no tenga que ser necesariamente circular, reconfigurándose así el puesto de conducción. El protagonista de esa próxima generación del i-Cockpit, sin salpicadero como tal, es el Hyperquare. Es un volante cuadrangular que integra una pantalla con superficies circulares en cada una de sus esquinas con diferentes funciones seleccionadas por los pulgares. El volante, que se retiraría cuando el coche alcance el mayor grado de conducción autónoma, se combina con una pantalla circular central a la vez que se extiende hasta el suelo para ofrecer una experiencia inmersiva a los pasajeros. El objetivo de Peugeot es contar con el Hypersquare en algún coche de producción antes de finalizar la década.