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Roberto Santiago gana el Fernando Lara con ‘La rebelión de los buenos’

  • El autor denuncia la codicia de las corporaciones farmacéuticas en una novela negra. 

  • El madrileño está tras ‘Futbolísimos’, un verdadero fenómeno de la literatura juvenil.

Roberto Santiago con el premio Fernando Lara

Roberto Santiago con el premio Fernando Lara / Juan Carlos Muñoz

El narrador, guionista, dramaturgo y director Roberto Santiago (Madrid, 1968) se hizo ayer, en una cena en el Alcázar de Sevilla, con el XXVIII Premio Fernando Lara por La rebelión de los buenos, una novela con la que este autor de referencia en la literatura infantil y juvenil se afianza en la narrativa para adultos.

Santiago, que se presentó al galardón, dotado con 120.000 euros y cuya obra ganadora será publicada por la editorial Planeta, con el seudónimo de Marcelo Havertz y el título provisional de Ahora sé por qué lloráis y urde una novela negra en la que denuncia la avaricia de las corporaciones farmacéuticas y propone una reflexión sobre la bondad.

Tras recibir el galardón de manos del presidente del Parlamento de Andalucía, Jesús Aguirre, que estuvo acompañado por el consejero de Turismo, Cultura y Deporte Arturo Bernal, y la teniente de alcalde del Ayuntamiento de Sevilla Sonia Gaya, Santiago explicó que su historia arranca con un encargo, el que le hacen al protagonista, Jeremías, un abogado que ejerce también de detective privado. A él acude una mujer que tiene "sospechas fundadas de que su marido la engaña con una joven. La esposa le pide al detective", adelanta Santiago, "que escarbe en su vida y que destruya a ese hombre", lo que propiciará que Jeremías se adentre en el mundo de las farmacéuticas, "aunque no es una novela contra ellas, sino contra el sistema", dijo el escritor.

Santiago, que ha estado seis años documentándose para este libro, expresa su sorpresa por el hecho de que "nuestra salud esté en manos de un pequeño grupo de personas. El 80% de la población está sobremedicado, y la explicación es sencilla: a más medicación, más beneficios consiguen unos cuantos", observó el escritor, que, si en su primera novela para adultos, Ana –que dio pie a una serie, Ana Tramel, protagonizada por Maribel Verdú–, exploraba el mundo del juego, ahora se acerca al entramado de las compañías farmacéuticas, una investigación que le deja aún "espeluznado". La acción, precisa Santiago, ocurre en 2018 y 2019, antes de la pandemia, "pero el coronavirus, aunque no esté presente en este libro, ha hecho que ahora estemos más sensibles a estos temas. Creo que La rebelión de los buenos es la primera novela que aborda la cuestión de las farmacéuticas en España".

Roberto Santiago. Roberto Santiago.

Roberto Santiago. / Juan Carlos Muñoz

Santiago suele responder cuando le piden que se defina o que elija una de las facetas en las que trabaja que él se dedica a contar historias, no importa el lenguaje en que lo haga. El autor está detrás de los fenómenos Futbolísimos y Los forasteros del tiempo, traducidos a varios idiomas, y en el género juvenil, además, ha sido finalista del Premio Barco de Vapor (con El ladrón de mentiras) y ganador del Premio Edebé de Literatura Infantil con Jon y la máquina del miedo.

"No, no me pesa que la gente me conozca por Futbolísimos", afirmó Santiago en un encuentro con la prensa tras conocerse el premio. "¡Cómo me va a pesar vender cinco millones de libros! Que la gente te llegue y te diga que tu hijo no leía, pero que gracias a ti lo hace ahora... eso es maravilloso", declara, antes de mostrar orgullo por su trayectoria. "Yo he escrito 66 novelas, dos para adultos y 64 infantiles y juveniles, y por supuesto que voy a seguir con estas últimas, donde por cierto, como aquí, recurro a menudo al misterio, a la intriga".

"¿Cómo me va a pesar vender cinco millones de libros?", dice Santiago sobre su éxito en la literatura juvenil

El madrileño, que estudió Imagen y Sonido, nunca ha querido encasillarse como creador y ha alternado su éxito con los libros con otras propuestas como director y guionista, una vertiente en la que ha firmado películas como El penalti más largo del mundo o El club de los suicidas. "¿Una adaptación de La rebelión de los buenos? Me encantaría, pero no pienso en eso cuando escribo. Esto es un artefacto literario, puede sonar pretencioso pero para mí hacer literatura es como componer música, la voz está por encima de la trama, de los personajes. Aunque, claro, supongo que por mi formación, o deformación, profesional, quizás sea una historia visual. Pero ya veremos si salta a la pantalla", apunta sobre una obra que llegará a las librerías el 14 de junio.

El jurado de este premio, surgido de la colaboración entre Grupo Planeta y Fundación Axa, estuvo compuesto por Ana María Ruiz-Tagle, Clara Sánchez, Fernando Delgado, Pere Gimferrer y Emili Rosales. Desde que el premio se instauró en 1996 y se hizo con él Terenci Moix por El amargo don de la belleza, ha tenido entre los ganadores a Francisco Umbral, Juan Eslava Galán, Ángeles Caso, Nativel Preciado, Zoé Valdés o Ángela Becerra, entre otros. El pasado año fue Máximo Huerta, con un libro de corte autobiográfico, Adiós, pequeño, el novelista que se hizo con el Fernando Lara.

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