No es que la tenga tomada con el hombre, pero es que cada vez que abre la boca dan las doce. Por eso, tal vez, es tan reacio a comparecer o a responder preguntas. En su desdichada comparecencia triunfal en la afirmó que en siete meses ha hecho más que Rajoy en siete años soltó dos perlas cultivadas en la concha de esa estulticia satisfecha de sí misma -la marca de los arrogantes memos- que sobrepasaron las muchas con las que alguien tal vez escriba algún día la antología de disparates de la era Sánchez, el presidente por accidente que ha convertido en realidad política la idiocracia (gobierno de los idiotas).
Hay que tener poca sensibilidad hacia las víctimas -incluidas las de su propio partido- para afirmar, a propósito de la comida navideña en la que Idoia Mendía, la secretaria general de los socialistas vascos, compartió mesa, brindis y risas con Otegi: "Saben que en estas fechas, como en el preludio de las campañas, se suelen hacer fotografías de distintos grupos. No hay ningún elemento para la polémica". Y sobre José María Múgica, el hijo del histórico líder socialista asesinado por ETA que ha dejado el partido tras la vergonzosa reunión, ni una palabra.
En cuanto a los andaluces es inexplicable que no estallara una tormenta política, con la participación en primera fila de los socialistas andaluces presididos por Susana Mal Perdedora Díaz, al oírle decir que el Gobierno utilizará "todos los instrumentos del Estado" que estén a su alcance si el futuro Ejecutivo andaluz "pone en cuestión o recorta derechos y libertades" de las mujeres. ¿Esto quiere decir que el PP y Cs -los dos partidos que aspiran a formar Gobierno- llevan en sus programas el recorte de los derechos y libertades de las mujeres andaluzas en un proyecto llamado "con la pata quebrada y en casa"? ¿Quiere decir que los 749.275 andaluces que han votado al PP y los 659.631 que lo han hecho a Cs son machistas, misóginos, heteropatriarcales, falócratas y presuntos o casi seguros maltratadores? ¿Y que los 395.978 andaluces que han votado a Vox son aún peores? ¿Quiere decir que los derechos y libertades de las mujeres están tan amenazados por este 1.804.884 de andaluces que se justificaría la intervención del Gobierno aplicando una especie de 155 antimachista que suspendiera la autonomía andaluza? Imposible saber si este hombre es más zoquete que oportunista, más trapacero que tonto.
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