ESTRATEGIA o memez? Pedro Sánchez afirma que Podemos "ha modulado" su discurso y que por ello puede haber "entendimiento". ¿Lo cree? ¿Se lo ha tragado? ¿Es más inteligente que Pablo Iglesias y le tiende el capote o es más simplón y ha dado por buena la moderación de Podemos? ¿No conoce las estrategias de infiltración y de lobo con piel de cordero que históricamente han utilizado esos viejos enemigos de los socialistas que son los comunistas? ¿Ignora que, incapaces de lograr buenos resultados con sus propias siglas, el PCE se disfrazó de IU y está protagonizando ese curioso intento de fusión, absorción o hibridación que se llama Ahora en Común?

¿Cree Sánchez en este baile que un día une a Garzón y a Iglesias y otro los separa, en la posibilidad de hacer una especie de frente popular que sumaría al PSOE con Ahora en Común y Podemos? ¿Está dispuesto a todo -y todo significa unir la socialdemocracia moderna europea con la confusa extrema izquierda poscomunista, el pos 15-M y los antisistema- a cambio de la Moncloa? ¿Cree que al PSOE y a estos movimientos improvisados les unen más cosas de las que les separan y enfrentan? ¿No le resulta raro que el pasado sábado el 89,4% de IU haya apoyado que Ahora en Común, nuevo disfraz del PCE, sea la candidatura unitaria para las próximas elecciones y que Garzón se postule como candidato a la Moncloa, cabreando a los de la Izquierda Abierta de Llamazares ¿No le extraña que a la vez no deje de juguetear/negociar/suplicar con el Iglesias que ese mismo sábado afirmaba su voluntad de que Podemos sea "el nombre y el eje" de su candidatura para las generales? ¿Quién puede fiarse de ellos sin ser tonto de remate?

¿Estrategia o ambición personal y partidista? ¿Cree Sánchez que se puede pactar con esta agria ensalada de siglas, ambiciones, liderazgos y encubrimientos? Ese mismo y caótico sábado Sánchez afirmó que está dispuesto a llamar a Podemos y a Ciudadanos, además de a IU y al PNV. ¿Comunistas, antisistema, nacionalistas clericales, liberales y socialistas unidos? Por lo visto la Moncloa bien vale una suma de opuestos que, en el caso de que le apoyaran para convertirle en presidente del Gobierno, pondrían bajo sus pies un suelo tan movedizo que haría a España ingobernable y podrían comprometer lo logrado en la dura recuperación de la crisis. Como socialista Sánchez está demostrando ser heredero de Zapatero, no de González.