TIEMPO El último fin de semana de abril llega a Sevilla con lluvia

DERBI Horario y dónde ver el Betis-Sevilla

MONTESEIRÍN, en un artículo titulado Un paso adelante, anuncia que no aspirará a formar parte de la próxima Ejecutiva Provincial del PSOE, que ahora preside de forma honorífica, e invita simultáneamente a Viera a que siga su ejemplo y renuncie a la reelección como secretario provincial. Mutatis mutandis, es como si Esperanza Aguirre anunciara que no aspirarará a ningún cargo orgánico en el PP e invitara a Rajoy a hacer lo mismo que ella en vez de presentar su propia candidatura para medir el respaldo que tiene en el partido allí donde hay que medirlo, en un congreso. El alcalde, en su artículo, equipara la fortaleza del PSOE con su propia permanencia en la Alcaldía por tercer mandato consecutivo, circunstancia que no obedece a su mayor apoyo electoral (perdió ante el PP de Zoido), sino al pacto de gobierno con IU. Por tanto, el bastión socialista en Sevilla no es hoy por hoy la capital, sino la provincia, donde la maquinaria que dirige Viera arrasa en todas las convocatorias electorales. Monteseirín también omite que quien, a petición de Chaves, afrontó la situación excepcional de crisis interna en el congreso de 2004 no fue él, que rehusó, sino Viera, y que se limitó a subirse al carro del triunfo como presidente cuando ya se vislumbraba la victoria de la lista oficialista frente a la del rebelde Caballos. Monteseirín, con esta anunciada retirada, trata de revestir como un gesto de pretendida generosidad su debilidad política y lanzar de paso la señal para que sus seguidores, amplificando de forma calculada los ecos, proyecten la sensación de que existe una grave crisis interna que obligue a intervenir a las ejecutivas regional y/o federal para imponer una pax que le garantice cierta cuota de poder. Como han dicho Pizarro y Guerra, es insólito que Monteseirín haya instado a Viera a que no se presente en vez de articular en torno a su persona una candidatura alternativa y disputarle a aquél el liderazgo del partido. Pero su cautela para no perder es más fuerte que su coraje político; como él no se arriesga a dar el paso al frente, pretende que sea Viera quien dé el paso atrás.

Tags

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios