La encuesta electoral que publican hoy y mañana los periódicos del Grupo Joly deja muy claro que los andaluces se han sentido cómodos con el Ejecutivo autonómico de Juanma Moreno. Casi un 70% de los encuestados, que van desde el centro-izquierda hasta la derecha, aprueban la labor del Gobierno PP-Cs mientras que sólo el 29% la suspende. La opción de un Gobierno en solitario del PP es la preferida de los encuestados, aunque es cierto que apenas con un 26,2%. Eso sí, un 58% de los entrevistados consideran que, llegado el caso, el PSOE debería abstenerse para facilitar al PP gobernar en solitario sin el apoyo de Vox, que es el partido que mayor rechazo genera en la población andaluza. De el sondeo realizado por el instituo Dym, se saca fácilmente una conclusión: los andaluces prefieren la moderación a la radicalidad, sea esta de derechas o de izquierdas. Y ése ha sido el mayor logro del todavía presidente de la Junta de Andalucía: transmitir una imagen de moderación y tranquilidad. Independientemente de quien gane los comicios del próximo domingo 19 de junio, todos los candidatos deberían tomar nota de esta preferencia. El PP y el PSOE andaluces deben enterrar de una vez cualquier coqueteo con los populismos de derechas e izquierdas, como los que actualmente mantienen los populares en Castilla y León o los socialistas en el Gobierno de la nación. Hasta ahora, Juanma Moreno ha sabido, pese a contar con el apoyo parlamentario de Vox, evitar cualquier deriva radical en sus políticas. El candidato socialista, Juan Espadas, por su parte, demostró en su paso por la Alcaldía de Sevilla capacidad de diálogo y sosiego. Ese es el rumbo que aprueban los andaluces y no se debería cambiar.