La operación contra el contrabando de tabaco desarrollada el jueves por la Guardia Civil en Aznalcázar ha concluido con la detención de dos personas y con el alijo de casi 4.000 kilos de hoja de tabaco. Esta mercancía se guardaba en la finca La Escuadra, en el Camino del Ventorro, justo en el kilómetro 22,5 de la carretera A-474, que conecta Aznalcázar y Pilas. La casa de campo de la finca funcionaba como una fábrica casera en la que se picaban las hojas de tabaco. De hecho, había cuatro picadoras industriales, cada una de ellas valorada en unos 1.200 euros.

La investigación surgió la madrugada del 31 de diciembre. Sobre las tres menos diez de la mañana saltó la alarma de la finca, que está conectada a la centralita de una compañía de seguridad privada. Esta empresa dio aviso a la Guardia Civil. Cuando llegó un patrullero, vio que había indicios de que se había producido un robo. Había daños en el cercado y una de las rejas de la casa estaba reventada.

El patrullero que acudió al aviso pertenece a la Usecia del Aljarafe, una unidad de seguridad ciudadana que atiende a toda la comarca, que pertenece a la compañía de Sanlúcar la Mayor y que tiene su base en San Juan de Aznalfarache.

La persona que había alquilado la vivienda explicó a los agentes que había sido una falsa alarma y les pidió que se marchasen. Los guardias civiles desconfiaron de esta actitud, máxime cuando todo apuntaba que había habido un robo, o al menos un intento de ello. Ante las evidencias, y las presiones de los agentes, el inquilino aceptó que los guardias entraran en la casa y realizaran una inspección de la misma.

Las picadoras intervenidas en la casa.

Allí encontraron 19 cajas, cada una de ellas con unos 200 kilos de hojas de tabaco. En total, se trata de 3.800 kilos de este producto. Junto a estas cajas estaban las cuatro máquinas de picar, 74 bolsas de un kilo cada una con tabaco ya picado, y otras cuatro bolsas de basura grandes que se utilizaban durante los trabajos del picado de tabaco.

A partir de aquí se hizo cargo de las diligencias el puesto de la Guardia Civil de Aznalcázar, que es el que ha elaborado el atestado que se ha enviado al juzgado número 2 de Sanlúcar la Mayor, encargado del asunto. 

Una carretilla saca las cajas de la casa.

Los dos detenidos tienen antecedentes por contrabando de tabaco. Son un hombre y una mujer, ambos con domicilio en Bormujos. El primero responde a las iniciales I. M. V., de 47 años y sobre el que pesan tres reclamaciones judiciales, una de ellas emitida por un juzgado de Algeciras. La segunda es P. M. G., de 46 años. A ambos se les intervinieron 2.394 euros en efectivo.

Este tipo de organizaciones suelen comprar la hoja de tabaco de forma legal, para luego picarla y darle salida al tabaco picado en los circuitos de contrabando. De esta forma, se ahorran los impuestos y obtienen los beneficios íntegros de las ventas.