"El único objetivo de los dos años que nos quedan será pagar"

La calle Real de Burguillos era ayer al filo de las cinco un desfile de trabajadores -camisetas con logos, monos de trabajo, pancartas- que, con sus jefes, se dirigían al Ayuntamiento. Eran parte de las más de 140 empresas -hay 15.000 trabajadores afectados- a las que Burguillos Natural, sociedad municipal en proceso de liquidación, les debe más de 14 millones de euros. No quisieron perderse el Pleno en el que se dio cuenta de la dimisión del alcalde y ex gerente de la citada empresa, José Juan López (PSOE), y ocuparon el salón de sesiones buscando el compromiso de que el Ayuntamiento reconozca la deuda, como ha hecho con los 140 trabajadores de Burguillos Natural a los que se deben salarios. Sólo obtuvieron una vaga promesa y salieron sin saber quién será su interlocutor. El PSOE no tiene un candidato claro para asumir la Alcaldía.

"Acabamos de llegar del partido de Sevilla, hemos acudido pidiendo auxilio", explicaba una desbordada Mariana Pérez -la alcaldesa accidental tras la dimisión "por sorpresa" de López-, quien admitía que la situación "es muy difícil", que sólo estaban parcialmente al tanto porque el alcalde llevó una gestión "muy personalista" y que los acreedores "tienen toda la razón". Lo único que pudo avanzar es que el PSOE se ha comprometido a "abrirles puertas, con todos los delegados y los consejeros de la Junta" para lograr "subvenciones". La persona que lidere el proceso, "tiene que ser muy fuerte", dijo.

La sesión se convirtió en un toma y daca verbal entre empresarios, trabajadores -entraron unos 170 en el sala- y unos políticos desconcertados y tuvo que suspenderse antes de sortear las mesas para las elecciones europeas, el motivo con el que el se convocó hace semanas antes de que se precipitara todo.

Entre el público había muchas historias personales: un empresario al que le deben cinco millones y prefería no decir su nombre y poner en riesgo contratos con otras administraciones; el veterano propietario de Estirado Barrera S.L., 40 años como constructor, que se encargó de la estructura del aparcamiento de la sede de Burguillos Natural y al que le deben 350.000 euros y Hacienda ya le ha embargado sus naves en Coria; o Rafael Barrera, empresario de rótulos y señalizaciones que ha reducido su plantilla de siete a tres personas. En el juzgado, hay entre 70 y 80 demandas por impagos.

Pérez abrió la sesión repitiendo el compromiso del PSOE de Sevilla, pero no se libró de los pitos cuando quiso rebajar la tensión comentando que, "por una vez, está el salón de Plenos lleno". En el turno de los grupos, Cristóbal Domínguez, de IU, fue escueto: "El alcalde ha dejado un vacío de poder, ha actuado solo y dejado el marrón al equipo de gobierno. IU ofrece su apoyo para salir del atolladero". Domingo Delgado, del PP, subrayó que el alcalde durante 14 años no puede irse "con un papelito en el que no dice más que falsedades", "un alcalde con respeto por su pueblo hubiera dado explicaciones". Además, hizo hincapié en el "caos organizado, el daño que ha hecho dejando familias en paro y empresarios en la ruina... Qué menos que venir a este Pleno". Finalizó recordando que todo el equipo socialista es responsable.

Con todo en contra, el portavoz socialista, José Antonio Santos, se atrevió a loar la figura del ex alcalde, al que pidió que se juzgue por 14 años. Varias frases pudieron oírse antes de que desistiera de terminar: "No hubo mala fe, ni intención de engañar, sino de buscar el beneficio y el desarrollo para sus vecinos (...). Es y debe seguir siendo un referente para nuestro pueblo".

"Ahora estoy más convencido de que también sois responsables, que os tenéis que ir todos de aquí", le espetó Domínguez, quien recordó que ayer mismo un vecino había declarado en el juzgado que el alcalde le "amenazó y coaccionó" para que vendiera una finca (López emitió un comunicado para anunciar que se querellará por ello). El del PP se atrevió incluso a decir que quizá lo mejor fuera que se creara una junta gestora en el Consistorio.

Ante las insistentes preguntas de los empresarios, el grupo socialista insistió en que no puede concretar nada más hasta las primeras semanas de junio y que, se quede quien se quede, no habrá más obras, ni proyectos que emprender. "El único objetivo de los dos años que quedan (hasta las elecciones municipales 2011) será pagar".

Suspendida la sesión, el portavoz socialista y edil de Hacienda, respondió de corrido a la pregunta clave: cómo es posible que un municipio modesto se embarcara en proyectos que le lleven casi a la quiebra. Lo hizo culpando a la Junta por aplicarles "injustamente" los límites del POTA antes de que se aprobase: "Nos dejó fuera del PGOU dos planes parciales de los que dependía la viabilidad económica de nuestro proyecto. Nos ha repercutido en unos 20 millones con los que contábamos, mediante acuerdos, impuestos, vía ingresos del Estado por aumento de población. Hoy podríamos tener 12.000 habitantes, pero tenemos 7.000, 5.235 reconocidos y, como todos los ayuntamientos, prestamos más servicios de los que nos competen".

Pero las obras de estos empresarios se encargaron después de 2006, incluso después de las elecciones de 2007, cuando se sabía del recorte del PGOU. Y en Burguillos, decir que no se habla de otra cosa, no es por una vez un lugar común. La mayoría achaca la situación a una mala gestión de López. Pero unos ven en ello mala fe e intereses. Otros, simplemente, ingenuidad y falta de previsión. Mientras, el colegio sigue con caracolas, algunas urbanizaciones y el polígono industrial con luz de generadores que de vez en cuando se llevan sus dueños porque no se paga el alquiler. El imponente edificio multifuncional en el que tuvo su sede Burguillos Natural es casi un edificio fantasma. Sólo sigue abierta la biblioteca y un local que ocupa una empresa de catering. En la grúa ha anidado una cigüeña.