Afincado en Montevideo, donde ha ejercido hasta diciembre como director deportivo de Nacional, Daniel Alejandro Lembo fue uno de los grandes protagonistas de la semifinal que el Betis ganó en San Mamés y en la que marcó el penalti que mantuvo vivo a los verdiblancos en aquella tanda que otorgó la clasificación a la final.

–¿Qué recuerdos mantiene de aquel partido?

–He vivido partidos difíciles, pero ése fue el más difícil que tuvimos, con una gran emoción y un gran ambiente. Se acabó en empate, se llegó a los penales y no era fácil patear con todo un estadio en contra, todos conocemos lo que era el viejo San Mamés. Tengo muchos recuerdos buenos del Betis, aunque siempre las victorias es lo que más queda a la gente y ese partido fue de los más importantes.

–¿Pidió lanzar ese penalti que luego fue decisivo?

–Sí, pedí yo el quinto, creía que iba a ser el que nos clasificara y nos diera el triunfo. Luego pudo ser trágico, pero lo convertí y nos metimos en la final. No sé si fue el más importante, pero sí el más difícil. El ambiente era tremendo, el estadio parecía que se movía, estaban ellos muy ilusionados también. Fue un lindo partido y esperemos que el jueves puedan hacerlo bien los muchachos.

Lembo celebra su penalti en la semifinal de Copa ante el Athletic en 2005.

–Con su experiencia, ¿qué tipo de partido cree que le espera al Betis en Mestalla?

–Como toda final, que esto casi que lo es, será un partido duro. El Valencia es un buen equipo, pero creo que el Betis tiene las armas para ganar. Si maneja bien los tiempos y la ansiedad, el Betis tiene equipo para ganar futbolísticamente.

–Se ve que conoce bien al equipo verdiblanco...

–Estoy permanentemente siguiendo al Betis y pendiente del equipo. Quedó un sentimiento, y un vinculo con mucha gente del club, con la ciudad, trato de seguir y apoyar. Mis hijos son sevillanos y el varón es un fanático del Betis.

–¿Qué opinión tiene del estilo de fútbol con Quique Setién?

–A mí personalmente me encanta. Lo vengo siguiendo, lo hemos mirado mucho con entrenadores de acá. Su modelo de juego es el que tiene Nacional. Es un gran espejo también para tomar.

–Por aquí sigue jugando un tal Joaquín que también estaba en su época...

–Increíblemente ahí sigue tanto tiempo después. Me da una gran alegría, es un referente de una gran categoría, como jugador y como persona. Ha marcado un antes y después, en los últimos años es el gran referente del club. De los antiguos escuché hablar de Gordillo y de otras épocas, pero de los tiempos actuales, de los últimos 20 años, es él.

–El entrenador entonces era Lorenzo Serra Ferrer, ahora el vicepresidente deportivo.

–Hemos conversado en este tiempo, hemos tenido la misma profesión. Sabe mucho de fútbol. Nos dejó muchas enseñanzas para nuestra carrera. No es casualidad que Serra esté ahí, ¿no?

–¿Esperaba este resurgir con él de nuevo en el club?

–Uno esperaba que le diera ese salto al club, aunque fuera desde otro sitio, que era la única duda que había. Tiene una visión de jugadores y futbolística diferente, aparte de ser muy inteligente. Lleva sus planes a cabo a la perfección. Como entrenador ya lo demostró por dos veces. No sabía si le iba a llegar tanto a los jugadores, al cuerpo técnico, pero lo hizo. El Betis está nuevamente posicionado, más allá de esta semifinal, está otra vez donde tiene que estar.