Si la primera planificación de Lorenzo Serra Ferrer supuso una revolución y la llegada de jugadores con un alto caché en el mercado, la idea del vicepresidente deportivo para esta temporada pasa por seguir aumentando el nivel de la plantilla con la llegada de varios jugadores de nivel, esas opciones A que aparecen en la agenda de los técnicos.

A la espera de lo que suceda con Fabián, cuya continuidad es deseada pero que dependerá de múltiples factores cuando llegue el momento de tomar una decisión, Serra Ferrer ya aglutina numerosa información sobre jugadores como Óliver Torres, Mikel Merino, Denis Suárez o el mismo Dani Ceballos, los ya conocidos de esa agenda del balear para darle un nuevo impulso al Betis tras su clasificación europea.

"Hay que estar pendiente, hablar muchas cosas, mantener el contacto permanente con Lorenzo (Serra Ferrer) y el club para ver los temas que hemos valorado. Descansaremos y llegaremos al principio con la ilusión y las expectativas muy grandes. Veremos a ver si conformamos un buen equipo para el año que viene", manifestó ayer el propio Quique Setién durante el homenaje que le realizó la Agrupación de Béticos Veteranos.

Con tres fichajes ya cerrados -Pau López, Inui y Canales-, en el Betis se está pendiente tanto de las entradas como de las salidas. El club no le cierre las puertas a la venta de ningún jugador, aunque, evidentemente, unos nombres sí verían facilitado ese adiós en el caso de llegar una propuesta interesante para todas las partes. Ahí está el caso de Camarasa, una de las inversiones principales del pasado mercado, y que no ha ofrecido el rendimiento esperado. En el club se valora el potencial del valenciano, que sigue manteniendo buen cartel, sobre todo en Inglaterra. En una situación similar se encuentra Durmisi, al que se espera en la lista definitiva para el Mundial, lo que aumentaría su cotización en el mercado a la hora de atender una posible negociación.

Un caso distinto es el de Fabián. Los principales clubes europeos ya han sondeado a la agencia de representación del palaciego, después del espectacular crecimiento experimentado esta temporada. Al centrocampista no le importaría continuar una temporada más en Heliópolis -incluso con una revisión de contrato-, pero los 30 millones de euros de la cláusula de rescisión están al alcance de cualquiera de esos clubes que han llamado a su puerta y que multiplicaría por tres como mínimo lo que percibe hoy en el Betis.

Una posible venta de Fabián, además, supondría una inyección económica al proyecto, que se reinvertiría en fichajes. Precisamente, Serra y sus colaboradores trabajan con diferentes escenarios, ya que no sería lo mismo acudir al mercado con el dinero que dejaría un traspaso de Fabián, como tampoco las necesidades para reforzar a la plantilla serían las mismas de permanecer el palaciego.

Como ha venido informando este periódico, Serra ya conoce la predisposición de algunos jugadores para recalar en el proyecto, como los casos de Dani Ceballos, Óliver Torres o Mikel Merino, aunque las condiciones de salida de todos ellos no son idénticas. Mientras el Real Madrid no parece dispuesto a facilitar un regreso del utrerano, el Oporto y el Newcastle sí atenderían propuestas por los otros dos centrocampistas, siempre y cuando se acercaran a lo que abonaron en su momento, 20 millones en el caso del club luso y siete por parte del equipo inglés.

Serra le quiere dar una vuelta de tuerca al Betis del próximo año y su agenda ya está repleta otra vez de primeras opciones.