Villarreal - Betis | Análisis

El sello de ser competitivo

Los jugadores del Betis festejan el gol de Borja Iglesias.

Los jugadores del Betis festejan el gol de Borja Iglesias. / Domenech Castelló / Efe

Pellegrini dice siempre que cuando no se puede ganar, lo mejor es no perder. Y eso hizo el Betis en La Cerámica: sumar un muy buen punto en un partido muy táctico y con ingredientes arbitrales en torno al VAR cargados de indignación para un conjunto verdiblanco que firmó una segunda parte bastante gris.

Un segundo acto en el que sufrió demasiado por el empuje de un Villarreal al que le ganó el goal average particular, detalle también importante para los de Pellegrini en esa lucha por jugar la Champions.El Betis jugó con un claro 4-4-2, con Ayoze acompañando a Borja Iglesias, y Rodri y Canales en las bandas pero con libertad para moverse por dentro. Y enfrente, un Villarreal con un claro 4-3-3 que intentó por medio de Parejo tener mucho la pelota y percutir por las alas.

Sobre todo por medio de Pedraza, en el primer tiempo, y luego, en el segundo, mediante Samu Chukwueze.Y hasta llegó a instalarse el cuadro de Setién en el campo de un Betis que, poco a poco, dio un paso adelante y empezó a circular la pelota con precisión y velocidad, intentando hacer daño con Miranda y Ruibal, con centros peligrosos. La presión tras pérdida funcionaba en ambos equipos, pero con balón el ritmo no era muy alto y se vieron fases donde apareció el tedio. Un encuentro muy táctico en el que ni el Betis ni el Villarreal querían cometer el más mínimo fallo para no conceder nada al rival. Pero así llegó el 0-1. Error de Reina al intentar atrapar el tiro de Rodri que cazó un oportunista Borja Iglesias. Buena ventaja para un Betis que atrás sufrió poco para mantener la renta antes del descanso fruto del buen trabajo de un muy seguro Pezzella.

Pero tras el descanso, el Villarreal le metió una marcha más a su fútbol y Terrats, entre líneas, le hizo mucho daño a un Betis que apenas salía de atrás y que vio cómo le empataron el partido con polémica. Por eso, Pellegrini, en un buen movimiento desde el banquillo, decidió dar entrada a Luiz Henrique. El brasileño comenzó fuerte buscando los espacios, pero acabó diluyéndose. Mientras, un buen Miranda siguió subiendo y centrando en la segunda mitad, pero nunca encontró un rematador. No fue buena la segunda parte de un Betis que hasta cometió errores en la entrega, sobre todo en las botas de Guardado en el tramo final que casi le cuestan un disgusto.

Defensa

Sensación de seguridad con Rui Silva y muy buen partido de Pezzella. Los laterales, Miranda y Ruibal, cumplieron bien.

Ataque

Con Canales muy gris, Rodri fue algo más protagonista. El Panda marcó y Ayoze se sintió cómodo, aunque fue de más a menos. Ruibal y Miranda, con un buen partido, percutieron por los costados.

Virtudes

Ni el VAR descompone al Betis.

Talón de Aquiles

El mal inicio del segundo tiempo.

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