Joaquín Sánchez tiene ya 600 partidos de Primera a sus espaldas y ni mucho menos sus piernas lo acusan como para pensar en una retirada. Todo lo contrario. Su aportación aún es digna de su historia dentro del fútbol español. Y por eso Manuel Pellegrini lo quiere para intentar subir más escalones la próxima campaña. También tendrá a Bartra como puntal defensivo.

Joaquín | A diferencia de Marcelo, esos aplausos van a seguir tras el verano

La distensión de dos equipos con los deberes más que hechos dio aún más protagonismo al ingreso en el terreno de juego de dos de los jugadores más importantes en las dos últimas décadas de la Liga, Marcelo y Joaquín. El madridismo aplaudió a rabiar a su jugador, que se va, pero también tributó un sentido homenaje a Joaquín. Pero ojo, que el capitán verdiblanco no ha dicho su última palabra en el fútbol español, ni mucho menos. Y si no acercó el triunfo bético, fue porque le cayó a la izquierda y alta.

Bartra | La tranquilidad de tener un líder en la defensa para el futuro

El fino central catalán volvió a cuajar un buen partido en la retaguardia. Muy encima de sus pares para anticiparse, rápido en los balones largos y fundamental para anticiparse al remate, como ocurrió en el rechace del tiro de Benzema al principio de la segunda parte. Rodrygo se encontró con un caramelo para hacer el 1-0 y sin embargo Bartra metió el pie de forma providencial para desviar el balón. Si su nivel es el de los últimos meses, Pellegrini sabe que tiene un líder para la 22/23.

Tello | Adiós a un jugador especial y con mucho veneno

Cristian Tello salió a disputar los últimos minutos del partido para así despedirse de la afición bética, con la que ha compartido momentos realmente felices, alternados con otros más bajos debido a los problemas del extremo para gozar de una confianza plena y sostenida de sus entrenadores. Se va un extremo fino, agudo, peligroso. Y con gol.

Guido | Quedó claro que si se va, su vacío no será pequeño

Un partido con el freno de mano echado fue una invitación a que Guido Rodríguez se hiciera aún más grande y omnipresente en la zona ancha, como ocurrió sobre todo en la primera parte. El argentino es un especialista en un cometido que no cuenta con demasiados jugadores de su nivel. Ojo si se va.