El Cristo del Descendimiento regresa a la Magdalena tras los trabajos de conservación

El Santísimo Cristo del Descendimiento, de la Hermandad de la Quinta Angustia, ha regresado este viernes a su capilla de la Parroquia de la Magdalena, tras los trabajos de conservación y limpieza a los que ha sido sometido los últimos meses por la restauradora conservadora Esperanza Fernández Cañero.

La cofradía del Jueves Santo ha anunciado que "de forma extraordinaria" abrirá la capilla al culto durante la jornada del sábado, de 8:45 a 11:30 y de 17:00 a 20:00 horas, y el domingo de 8:45 a 14:00 horas. De esta forma se podrá contemplar de cerca a esta talla atribuida con certeza a Pedro Roldán, y realizada en torno a 1659.

El Cristo del Descendimiento

Suspendido del sudario, y con un leve pero característico vaivén, es una valiosa talla de 164 centímetros de altura. Pese a carecer de documento que lo acredite, tiene grandes similitudes con otras obras de Pedro Roldán, como son los Cristos de los retablos del Sagrario y del Hospital de la Caridad. Su cuerpo dibuja una línea serpenteante que expresa mucho movimiento, con una importante contorsión en la zona abdominal. Se desconoce quién fue el artista que policromó la imagen, aunque los expertos señalan que debió ser alguien con conocimientos anatómicos, debido a las hipóstasis que aparecen en las piernas como consecuencia de haber muerto en posición vertical.

Su postura es muy similar a la que presenta el Descendimiento de Pedro de Campaña en su pintura realizada en 1548, actualmente expuesta en la sacristía mayor de la Catedral, que bien pudo ser admirada por Roldán y tomada como ejemplo, cuando ésta obra se encontraba en la parroquia de Santa Cruz. En el conjunto de su misterio, podría considerarse como uno de los grandes misterios del barroco en Sevilla.