Es ya una estampa clásica de mayo. Cuando la ciudad se encuentra inmersa en el tiempo de Pascua y en vísperas de un nuevo Pentecostés, la Hermandad de la Pastora de Santa Marina, en la calle Amparo, monta un fastuoso altar para adorar a Jesús Sacramentado, con motivo del Jubileo Circular de las XL horas que este templo acoge todos los años los días 22, 23 y 24 de este mes. Un preludio del Corpus Christi.
Este culto propicia que se pueda contemplar en tales fechas uno de los mejores altares sacramentales que se montan en la ciudad. Para ello, la primitiva corporación pastoreña luce todo su ajuar eucarístico. Desde su antiquísima custodia de grandes proporciones, a bandejas de plata, candelabros de brazos, cálices, copones, sacras, panes, espigas, uvas y vino. Todo es poco para adorar al Santísimo.
Detrás de este montaje hay horas de trabajo del equipo de priostía de la corporación, comandado por Álvaro Martín, quien también se encarga de la vestimenta de la Divina Pastora, que luce para este culto colores frambuesa y verde.
Vista general del altar al Santísimo en la capilla de la Divina Pastora.
Durante estos tres días, la capilla de la calle Amparo estará abierta de 10:00 a 14:00 y de 18:00 a 21:00. A las doce del mediodía se saludará a la Divina Pastora con el rezo del Regina Coeli, propio del tiempo pascual. Luego se procederá al ejercicio del Trisagio en honor a la Santísima Trinidad.
Jesús Sacramentado y la Divina Pastora.
Por la tarde, a las 20:30, se celebrará el triduo a Jesús Sacramentado, que comenzará con el rezo de la Corona Seráfica, las letanías y la consagración al Santísimo Sacramento. A continuación, tendrá lugar la liturgia de la Palabra y el sermón, a cargo de los sacerdotes Juan Antonio Cárrera Páramo, superior de la Sociedad de San Pablo de Sevilla; y Pedro José Rodríguez Molina, director espiritual de la hermandad. Concluirá el culto con la bendición y reserva de Su Divina Majestad y la salve solemne.
La Hermandad de la Divina Pastora y Santa Marina siempre ha tenido muy presente el culto al Santísimo en sus cultos, como quedó testimoniado en sus primeras novenas. En 1748 ya celebraba el Jubileo Circular de las XL horas. Esta corporación, además, es la heredera de la hermandad sacramental de Santa Marina, a la que se unió en 1929.
