La historia de Calamar y Rafaé, emblemas del misterio de las Tres Caídas de Triana

Sevilla/La Madrugá sevillana se aproxima con el Cristo de las Tres Caídas preparado para su estación de penitencia desde la Capilla de los Marineros. La hermandad de la Esperanza de Triana ha crecido considerablemente en los últimos años, hasta superar los 3.500 nazarenos en 2025.

Entre todas las figuras que componen el paso de misterio, destacan por su popularidad el caballo conocido como "Calamar" y el centurión romano llamado "Rafaé", denominaciones que forman parte del acervo cultural y devocional de la Semana Santa hispalense.

La hermandad de la calle Pureza procesiona con un misterio cuyas imágenes secundarias fueron realizadas por Castillo Lastrucci entre 1939 y 1941, mientras que el Santísimo Cristo de las Tres Caídas es una talla anónima del siglo XVII.

El origen del nombre "Calamar" tiene raíces en la financiación del paso, cuando la hermandad abrió libros de donativos para cada figura. El destinado al caballo recibió tantas contribuciones que gastó más tinta que el resto, surgiendo así el dicho de que "tenía más tinta que un calamar", apodo que acabó por consolidarse.

Por su parte, el centurión Quinto Cornelio, encargado por Pilatos de conducir a Jesús al Calvario, fue rebautizado como "Rafaé" siguiendo la costumbre sevillana de adaptar los nombres romanos a la fonética local. Esta dualidad se ha convertido en seña de identidad del paso trianero.

Un cambio de posición con historia

Durante parte de los años 60, "Calamar" procesionó en la parte trasera del paso, cuando actualmente va en la delantera. Existen dos teorías sobre este cambio: la primera señala que el Cardenal Segura ordenó modificar la posición porque la atención del público se centraba excesivamente en la anatomía del équido. La segunda apunta al canónigo Juan Sebastián Bandarán, quien habría sugerido que colocar al caballo delante del Señor resultaba irrespetuoso.

El completo conjunto escultórico

El misterio del Tres Caídas está compuesto por varias figuras secundarias además del centurión y su caballo:

• Un grupo de mujeres y niños que representan a las mujeres de Jerusalén
• Un esclavo negro
• Una mujer hebrea con niños
• El Cirineo

Los costaleros trasladan el paso con el característico "andar trianero", siguiendo el compás marcado por la banda de cornetas y tambores propia de la hermandad. Para la Madrugá de 2025, cabe destacar que "Rafaé" lucirá un casco con plumas rojas a modo de "cepillo", recuperando así un elemento tradicional que caracterizó al paso durante buena parte del siglo XX.