"Somos pocos y ya no tenemos a quien pasear". Así explican algunos cocheros de caballos la situación que vive el entorno de la Catedral, el Alcázar y el Archivo de Indias. Es decir, el punto más turístico de Sevilla. La imagen del Alcázar sin colas en la Puerta del León choca con la habitual masificación en ese punto, uno de los más concurridos de la capital andaluza.
La ausencia de personas en las taquillas se suma al descenso de venta de entradas por internet. Enero y febrero han superado las ventas en ese periodo de 2019, pero se prevé que marzo no lo consiga. El coronavirus es el principal responsable de esta estadística, influida por la ausencia de turistas chinos en Sevilla. Una baja muy sensible para el sector turístico de la ciudad, que ya echa cuentas de las pérdidas que parece que les vienen.
Este fenómeno contrasta con la tendencia alcista que estaba viviendo Sevilla hasta hace días. Los récords de pasajeros en el aeropuerto de San Pablo, las altas ocupaciones hoteleras o el boom inmobiliario de los pisos turísticos no son noticia ahora. La importante bajada de visitantes es lo más llamativo en la ciudad, principalmente en el centro y en el entorno de monumentos como la Plaza de España.
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