Sevilla

El Ayuntamiento estudia sumar el cementerio sefardí a la oferta turística

  • Ha recibido una propuesta para "poner en valor" los restos hallados en los 90 durante las obras del aparcamiento de Cano y Cueto.

Un nuevo atractivo para la ciudad. El Ayuntamiento estudia una propuesta para explotar turísticamente los restos del cementerio de época sefardí hallado en los años 1996 y 1997 durante la construcción del aparcamiento subterráneo de la calle Cano y Cueto. Así lo reveló este miércoles Gregorio Serrano, delegado de Turismo, Economía, Empleo y Fiestas Mayores, durante un foro organizado por la Asociación Sevillana de Empresas Turísticas (Aset) que versaba precisamente sobre turismo religioso y en el que participaron además de Serrano, Manuel García, hermano mayor de la Macarena, Antonio Távora Molina, presidente de Aset, y Antonio Távora Alcalde.

El delegado de Turismo, Gregorio Serrano, habló sobre las posibilidades existentes en la ciudad para fomentar el turismo judío, uno de los más relevantes del mundo, teniendo en cuenta la importancia de la historia hebrea en la ciudad. De este modo, se refirió a la posibilidad de dar a conocer los importantes restos judíos hallados durante las obras que tuvieron lugar a mediados de los 90 en la Puerta de la Carne: "Durante la construcción del aparcamiento de Cano y Cueto se descubrieron los restos de un cementerio judío muy importante. Nos han hecho llegar la posibilidad de poner en valor esos restos. Sería un referente para que nos visitaran muchos turistas judíos. Estamos abiertos a que los profesionales nos hagan llegar sus iniciativas en este sentido".

La intervención arqueológica previa a la construcción del aparcamiento subterráneo permitió detectar el cementerio sefardí y, lo que fue más interesante para los arqueólogos, descubrir su alto grado de estratificación que les permitió analizar las técnicas y formas funerarias en varias etapas. El cementerio hebreo de Sevilla estaba ubicado extramuros de la ciudad y con acceso directo al barrio judío. Su funcionamiento se extendió en dos grandes fases durante más de dos siglos, desde finales del XIII a finales del XV. La necrópolis judía, según otros hallazgos posteriores, se extendería hasta lo que es hoy el barrio de San Bernardo, a unos 500 metros de la Puerta de la Carne. Los restos arqueológicos que se encontraron durante la construcción del aparcamiento subterráneo fueron retirados, aunque se dejó en el interior del aparcamiento el testigo de una de las tumbas, una fotografía y una explicación de lo que se halló.

Durante el foro organizado por Aset se puso de manifiesto la importancia que el turismo religioso tiene en el mundo y cómo las experiencias basadas en la fe están ganando terreno dentro de los viajes de placer. Serrano destacó la huella de las tres grandes religiones monoteístas como uno de los grandes atractivos de Sevilla y resaltó que la basílica de la Macarena, según el mes, es el tercer o cuarto monumento más visitado de la ciudad: "Es muy significativo. Y no lo es por el edifico en sí, sino porque lo que hay dentro es prácticamente el alma de la ciudad en la Virgen de la Esperanza".

Antonio Távora Alcalde incidió en que la religión y la fe tienen un gran impacto en la industria turística. "Es una de las formas turísticas más antiguas y produce una industria secundaria muy importante". En este sentido, apuntó a la conveniencia de que los restaurantes del entorno de la Judería, como deferencia a las miles de personas que visitan la ciudad buscando sus raíces sefardíes, ofrezcan sus menús en hebreo y con platos de su cocina. Távora aportó interesantes datos, como que el turismo religioso mueve a más de 300 millones de personas y genera un negocio de 18 billones de dólares: "Una parte importante del turismo mundial es el turismo de peregrinaciones. El mercado turístico basado en la fe atrae a todo tipo de público y es menos susceptible a la influencia de la crisis". Por países, el número uno en peregrinaciones es Israel, seguido de Italia e Inglaterra.

Távora aseguró que hay que distinguir entre turismo religioso y cultural o de otro tipo y puso el ejemplo de la Catedral de Sevilla o de la basílica de Montmartre en París: "El que va allí es por los pintores y por las vistas, aunque también entra en la basílica".

Por último, hizo ver la necesidad de enfocar las visitas religiosas de la ciudad más allá de un evento concreto: "Habría que focalizar que la gente acuda a Sevilla como destino religioso por la cantidad de templos que hay, además de por una imagen concreta con devoción universal, que también la hay".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios