Alojamiento colaborativo GuadalVivir

Cuenta atrás para el primer cohousing de mayores en Sevilla capital

Los integrantes del primer alojamiento colaborativo para mayores en Sevilla capital, en marzo.

Los integrantes del primer alojamiento colaborativo para mayores en Sevilla capital, en marzo. / Juan Carlos Vázquez

El primer alojamiento colaborativo para personas mayores en Sevilla capital que quieren envejecer de forma activa y saludable, lo que se conoce como cohousing, debe iniciar este año las obras en la parcela colindante a la Agencia Espacial Española, con sede en San Jerónimo junto a la dársena del río.

Lo promueve colectivo GuadalVivir, asociación sin ánimo de lucro con fines sociales integrada por 38 personas con una media de 69 años, procedentes del sector de la salud, la docencia, la empresa, la arquitectura, la psicología y la función pública, entre otros. Esta es su página web.

Este cohousing de Sevilla es también el primero de España en el que interviene la administración pública más allá de ceder el suelo, ya que el Ayuntamiento de Sevilla, a través de la empresa municipal de la vivienda (Emvisesa), también logra la financiación, elabora el proyecto constructivo adaptado a las necesidades de los mayores que van a habitarlo y ejecuta la construcción.

Parcela junto a la sede de la Agencia Espacial Española del primer cohousing de Sevilla capital, en San Jerónimo, frente al río. Parcela junto a la sede de la Agencia Espacial Española del primer cohousing de Sevilla capital, en San Jerónimo, frente al río.

Parcela junto a la sede de la Agencia Espacial Española del primer cohousing de Sevilla capital, en San Jerónimo, frente al río. / Colectivo Guadalvivir

Tras recibir el suelo de manos del Ayuntamiento de Sevilla por 75 años (27/05/2019), Emvisesa convocó un concurso público que ganó Colectivo GuadalVivir y al que también se presentó la cooperativa La Morera, que se instalará en otra parte de la misma parcela. 

El apoyo de una empresa pública en la financiación es una de las claves de que este proyecto, ya que en otros cohousing del país los mayores tienen que autofinanciarse vendiendo sus propiedades o financiarse con un crédito bancario complicado de obtener cuando se sobrepasan los 65 años.

En la actualidad, GuadalVivir está cerrando con Emvisesa los términos económicos. El coste del edificio, con el mobiliario básico, asciende a 6 millones de euros. El pago de amortización de la obra oscila entre los 700 y 1.000 euros, una cantidad que el colectivo de mayores tratará de ajustar con Emvisesa para que se quede en una cifra asumible para un pensionista, ya que pagarlo en 25 años, que es la pretensión de Emvisesa, supondría abonar más de dos veces el coste del edificio, lo cual “no sería razonable” porque el inmueble, propiedad de Emvisesa, volverá a sus manos cuando pasen 70 años, explica Juan Reig, presidente de GuadalVivir y médico de profesión experto en la Unión Europea en tecnología y salud dirigida a potenciar la independencia de las personas mayores. 

Especialmente tras el drama de la pandemia del Covid, cada vez más personas mayores en España apuestan por vivir su vejez conviviendo con otros mayores en un alojamiento colaborativo donde se apoyen unos a otros, y dotado con todos los servicios, la tecnología de apoyo y zonas comunes que puedan necesitar.

Los miembros de este primer cohousing de la ciudad proceden de dos iniciativas anteriores a la pandemia que empezaron a tramitar alojamientos de este tipo en el Aljarafe y han elegido el nombre de GuadalVivir para simbolizar el río de experiencias que van a vivir en esta última etapa de sus vidas.     

El proyecto del edificio y sus instalaciones lo están definiendo los usuarios, según sus preferencias, con el asesoramiento de e-cohousing, el equipo de arquitectura que construyó Travensol (Madrid), el primer cohousing del país y el de más prestigio. El plan es construir 32 viviendas con zonas comunes que ya tienen 28 firmes candidatos a ocuparlas.

El Ayuntamiento de Sevilla, a través de Emvisesa, construirá el edificio con el codiseño del proyecto aportado por los integrantes del cohousing, al modo en que se hace en Europa. Casi la mitad del edificio será para los servicios sociales comunes (comedor, lavandería, zonas de cuidados y de ocio, huerto, etc.) y el resto para viviendas.

Emvisesa acordará con GuadalVivir los términos de la concesión administrativa para el plazo restante de cesión demanial desde la entrega de llaves. El bien que se entrega mediante concesión es el edificio que GuadalVivir abonará anualmente a través de un canon conformado, en primer lugar, por la amortización del préstamo contraído por el promotor, incluidos intereses, durante los primeros 25 años de concesión, que comprende los costes de construcción, así como otros gastos de gestión (honorarios facultativos, tasas, impuestos,…) que actualmente están en proceso de negociación.

Una opción vital que favorece la salud física y mental  

Los socios de este cohousing reclaman a las administraciones públicas que inviertan en iniciativas como las que ha promovido el Ayuntamiento de Sevilla para facilitar este tipo de proyectos de alojamientos colaborativos, sobre todo teniendo en cuenta que es una opción vital que previene la soledad de los mayores y favorece la salud física y mental. 

El envejecimiento de una población cada vez más numerosa en España ha generado un nuevo problema social: la necesidad de alojamientos para personas que quieren envejecer fuera de las residencias tradicionales. El cohousing es una alternativa que beneficia a la salud emocional al favorecer el envejecimiento activo y saludable, evita la soledad no deseada porque los mayores conviven en un grupo cohesionado, promueve una comunidad de autoayuda que disminuye el consumo de medicamentos, potencia las relaciones personales y sociales, y conduce a un mayor nivel de felicidad. En suma, ahorra gasto público a la administración en la atención de las personas mayores.

El cohousing supone un modelo participativo, autogestionado por las personas residentes; viviendas y economías individuales. Gastos comunes compartidos; equipamientos comunitarios como extensión de la vivienda privada; viviendas sostenibles y respetuosas con el medio ambiente; y diseño arquitectónico que favorezca el contacto social comunitario y con el entorno. Un envejecimiento activo se logra con una combinación de ejercicio físico, buena alimentación y buenas relaciones sociales.  

"No queremos depender de nuestros hijos ni ir a una residencia. Lo que aporta un alojamiento colaborativo para mayores no está cubierto por el sistema actualmente. Está comprobado que los integrantes de un cohousing ahorramos costes a la administración al usar menos los servicios sociales y de dependencia", señala Raquel Rico, que se ha sumado al proyecto.    

Colectivo GuadalVivir se brinda a ayudar y a colaborar con el barrio de San Jerónimo aportando las experiencias profesionales y vitales de sus socios.

Fomentar este modelo de alojamiento colaborativo

En España, la regulación básica de este modelo de alojamiento colaborativo está en sus inicios, a diferencia del gran desarrollo que ha tenido en los países europeos y americanos.

Los socios de GuadalVivir reclaman que las distintas Administraciones Públicas establezcan una reglamentación específica para el desarrollo de este modelo de alojamiento y mejorar las políticas públicas para promocionar la economía social.

En Sevilla, el Plan Estratégico Sevilla 2030 contempla la promoción de viviendas colaborativas (cohousing).

El Ayuntamiento de Madrid está promoviendo el cambio normativo para incluir el cohousing (17/07/2023).

Promotoras privadas como Aedas Homes están interesadas en cubrir la demanda de este tipo de alojamiento para mayores que quieren seguir siendo independientes. 

Otros cohousing en marcha en España

En España, hay varios proyectos de cohousing en marcha, como en Huelva, Málaga, La Palma (Canarias), Asturias, entre otras ciudades.

 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios