El Ayuntamiento de Sevilla aprobó esta semana en junta de gobierno la adaptación de la nueva Ordenanza Municipal de Actividades a la recientemente aprobada Ley Omnibús, texto que elevará al próximo Pleno municipal para su aprobación inicial el día 19 de febrero.

Las modificaciones introducidas en el borrador de la ordenanza afectarán al proceso habitual que la Administración hispalense debía seguir para la expedición de las licencias de apertura de negocios, y que ahora, en numerosos supuestos, se otorgará de modo inmediato, como es el caso del comercio minorista.

La nueva ordenanza de Sevilla recogerá la autorización de apertura a través de la denominada Declaración Responsable de Actividades, una especie de proceso de licencia exprés que la Ley Omnibús reserva a las actividades que no generan molestias, no son nocivas, ni tienen incidencia medioambiental, lo que permite agilizar su tramitación y sus controles posteriores.

Estarán, pues, sujetas al procedimiento de Declaración Responsable el pequeño y mediano comercio minorista (zapaterías, librerías, tiendas de ropa y joyerías, entre otros establecimientos), servicios personales como peluquerías y salones de belleza, por ejemplo; comercio mayorista, investigación y desarrollo, academias de enseñanza no reglada (academia de idiomas o de informática, por citar dos casos), pequeña industria (talleres artesanales), almacenes y actividades ocasionales no afectadas por la Ley de Espectáculos, según informó la Delegación de Medio Ambiente a este periódico.

El resto de actividades quedan sometidas al habitual procedimiento de otorgamiento de licencia de apertura, como son los talleres de vehículos, freidurías, gasolineras, salas de fiesta, bares, cafeterías, restaurantes y locales de copas, gimnasios, teatros y todos aquellos negocios cuyas característica así lo aconsejen por incidir de modo directo en la salubridad, seguridad y tranquilidad de las personas.

El Consistorio hispalense avanza que la autorización de expedirá de forma inmediata si los titulares del negocio presentan correctamente la documentación, al tiempo que recuerda que la "estricta y fiel veracidad" de los informes y documentos aportados recaerá de manera clara tanto en los profesionales técnicos como en los titulares de las actividades.

La nueva ordenanza municipal incluye también un refuerzo en los controles técnicos de las actividades, estableciéndose de manera expresa controles de oficio aleatorios a todas las actividades independientemente de si el procedimiento de obtención de autorización ha sido por licencia o por declaración responsable, teniendo evidentemente prioridad a la hora de su atención aquéllas que provengan de denuncias presentadas en la Delegación de Medio Ambiente.

La norma recoge como novedad que los cambios de titularidad de cualquier tipo de actividad se hagan de manera automática a través de la presentación de la comunicación formal en la misma Delegación de Medio Ambiente.

El texto que la delegada de Medio Ambiente, Encarnación Martínez, elevará al Pleno de febrero recoge otras medidas para reducir los tiempos de espera que la tramitación de estas licencias generan, y que se sitúan en los seis meses de media. El Consistorio se marca ahora un tope de tres meses para expedir las licencias con la nueva ordenanza. A partir de su aprobación, los tres informes preceptivos necesarios en la redacción de un expediente de apertura -urbanístico, medioambiental y Bomberos- se podrán realizar independientemente y ser notificados por correo electrónico al titular en el caso de que alguno sea desfavorable para que pueda ser solventado en tiempo real, no como ahora, que se comunica por notificación oficial certificada sólo cuando los tres documentos están concluidos.

La incorporación de las nuevas tecnologías como internet y e-mail se ampliarán con la posibilidad de que los documentos y planos se presenten en formato CD y también la aceptación del visado electrónico.

La normativa incluirá también la posibilidad de subrogación en un expediente de nueva apertura interrumpido durante su tramitación -hasta ahora debía comenzar de cero- para reducir los plazos.