La Facua critica la falta de control de la Junta desde la orden de 2006

"Sin control, la orden es una quimera". Quien así se expresa es el presidente de la Federación Andaluza de Consumidores y Usuarios de Andalucía, Rubén Sánchez, quien, como buena parte de los hosteleros, considera que el principal talón de Aquiles de la política antitabaco de la Junta se encuentra en la falta de inspecciones por parte de la Consejería de Salud sobre los establecimientos.

La Facua ha denunciado en varias ocasiones que ni la Junta ni el Ayuntamiento han realizado ninguna inspección en Sevilla desde que entrara en vigor la ley de 2006 que obliga a los establecimientos a indicar en un cartel si el local es un espacio libre de humos o si cuenta con una zona reservada para fumadores, que debe estar separada físicamente del resto del negocio y contar con un extractor de humos.

Al respecto, Sánchez subraya que "ninguna de las múltiples denuncias sobre los bares y cafeterías que no cumplen la orden han sido atendidas, en una clara dejación de funciones de la administración competente".

El incumplimiento de la normativa quedó reflejado en un informe elaborado por la Facua el pasado mes de mayo, en el que un estudio realizado en casi un centenar de bares demostraba que el 22% de los establecimientos de menos de 100 metros cuadrados incumplen la ley del tabaco al no exhibir un cartel a la entrada en el que se indique si se permite o prohíbe fumar en su interior.

El estudio también indicaba que sólo el 6,2% de estos pequeños negocios cuentan con un cartel en el que se señala la prohibición de fumar, por lo que se permite en el resto (93,8%), bien porque lo señalan con un cartel (71,6%) o por la ausencia del mismo.

Sobre la escasez de medidas que contribuyan a la reducción del tabaquismo entre los sevillanos también se pronunció ayer la delegada de Salud y Consumo del Ayuntamiento de Sevilla, Teresa Florido, quien afirmó que existen carencias en este terreno. "Somos conscientes de estas faltas, pero existe un decreto que regula que el control sobre la ley antitabaco es competencia exclusiva de la Consejería de Salud, y ahí el Ayuntamiento no puede hacer nada, porque no contamos con los medios para esta labor".