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Sevilla

La Junta no paga desde enero los cuidados a niños con trastornos

  • La deuda en la provincia supera los 2,7 millones Los padres y asociaciones como Asedown adelantan los pagos de los terapeutas que, en algunos casos, llevan seis meses sin cobrar

La Junta de Andalucía lleva desde enero sin abonar a los Centros de Atención Infantil Temprana (CAIT) las subvenciones y conciertos aprobados para 2015 para los cuidados de niños con parálisis cerebral, espina bífida, asperger, síndrome de Down y retraso madurativo, entre otros trastornos. La Plataforma Atención Temprana Andalucía -formada por padres de menores que reciben estos cuidados, terapeutas y asociaciones como Asedown y Asperger Sevilla- denuncian que, en algunos casos, son los propios progenitores los que adelantan el dinero a los CAIT para que éstos puedan pagar a los profesionales.

En Sevilla, la deuda que la Administración pública tiene con los quince CAIT existentes en la provincia asciende a unos 2.750.000 euros, según la Plataforma Atención Temprana Andalucía. A esta cifra hay que sumarle, según informa su portavoz, Antonio Guerrero, la deuda que la Administración andaluza tiene con los ayuntamientos que financian a los CAIT a través de convenios. Esta situación ha provocado que profesionales como los del centro de Morón lleven seis meses sin cobrar. "El Ayuntamiento no nos paga porque, a su vez, la Junta no le da el dinero acordado", aclara la terapeuta Rosario Rojo. "Esto no es la primera vez que ocurre. En 2012, llegamos a estar hasta 13 meses sin cobrar".

Asedown (Asociación Síndrome de Down de Sevilla y Provincia), que también actúa como CAIT, asegura que la Junta le adeuda unos 35.000 euros. "La asociación ha hecho frente a todos los gastos, no hemos recurrido a las familias, pero a partir de septiembre no sabemos qué vamos a hacer, no podemos adelantar más dinero", apunta Auxiliadora Sánchez, una de las coordinadoras de Asedown.

Desde la plataforma ciudadana denuncian que hay padres que han tenido que pagar de su propio bolsillo la terapia de sus hijos bajo la promesa de que el dinero se les devolvería. Es el caso de Rocío Casado, madre de un niño de 4 años que sufre el síndrome de Asperger. Durante seis meses, ha estado pagando 250 euros al mes para que su hijo pudiera ir a un logopeda y recibiera terapia en habilidades sociales, además de abonar otra cuota mensual para una terapia de psicomotricidad. Un dinero que, tal como confiesa, han tenido que prestarle sus padres, ya que no puede asumir estos gastos: tiene otra hija de dos años, ella está en paro y su marido, ingeniero, trabaja como teleoperador. "Salud debería quitar de la web que ofrece servicios de atención temprana. Es publicidad engañosa, el servicio lo estamos pagando los padres", señala Rocío Casado.

Hasta mayo de este año, el sistema de Atención Temprana de la Junta tenía registrados a 14.317 menores de 6 años de toda Andalucía. La Junta prevé llegar a final de 2015 a una cifra similar a la de 2014, unos 17.500 niños. Pero la plataforma ciudadana liderada por Antonio Guerrero asegura que en Andalucía hay unos 19.000 menores que requieren este servicio -unos 4.500 en la provincia de Sevilla-, cifra a la que hay que añadir "una bolsa de 2.000 menores no diagnosticados".

En marzo, en una reunión mantenida con la Consejería de Salud, según asegura la plataforma ciudadana, la Administración anunció que sacaría una convocatoria extraordinaria para pagar a las entidades y familias el dinero que habían adelantado, pero, hasta la fecha, no ha habido ningún movimiento. "Hoy, lo niegan todo", apunta Antonio Guerrero, portavoz de la Plataforma Atención Temprana Andalucía. "Somos el banco de la Junta", critica.

La Junta, por su parte, asegura que desde 2012 el presupuesto se ha estabilizado, "sin merma económica, ni recorte presupuestario". Así, para 2015, la Consejería de Salud aprobó una partida presupuestaria de 10,9 millones de euros. La Administración andaluza confirma que durante el primer trimestre de este año las asociaciones cobraron las subvenciones correspondientes a 2014, más de cuatro millones de euros; y asegura que la situación de este año no es diferente a la de ejercicios anteriores.

A esta demora se suma el miedo por parte de las asociaciones de padres de una privatización de la atención temprana con el nuevo acuerdo marco que la Junta pretende poner en marcha a partir del 1 de septiembre y cuyas condiciones han sido rechazadas por la Asociación de Terapeutas de Atención Temprana de Andalucía (ATAI), entre otras entidades.

Hasta ahora, existían tres vías públicas de financiación para los CAIT: convenios con los ayuntamientos, subvenciones y conciertos de la Junta. La Administración andaluza anunció a finales de diciembre en el BOJA la idea de eliminar todas las subvenciones y establecer un convenio marco al que han de adherirse las asociaciones o entidades que pretendan seguir dentro del sistema de atención temprana.

La Asociación de Terapeutas de Atención Temprana Andalucía (ATAI) alerta de que, diversos estudios económicos sitúan el coste de una sesión de 45 minutos con un menor entre 26 y 30 euros. Sin embargo, el nuevo acuerdo marco establece que la Junta abonará a partir de septiembre a los centros un máximo de 12,67 euros por sesión. Esto supondrá un déficit para los centros de entre un 40% y un 70%, en función del número de sesiones semanales asignadas, según explica Antonio Guerrero.

"El pliego de condiciones es inviable", reconoce Auxiliadora Sánchez, de Asedown, que aún estudia si firmar o no el acuerdo antes del 31 de julio. "Lo que ofrece la Junta es insostenible desde el punto de vista económico". Asociaciones como Asedown se quejan de que el acuerdo obliga al centro a "cumplir una serie de exigencias que luego no te van a pagar".

Así, el acuerdo excluye del pago la falta de asistencia del menor en caso de enfermedad o por las vacaciones, las horas dedicadas a la incorporación de datos a los sistemas informáticos, las reuniones de terapeutas, las tareas de valoración y diagnóstico, realización de pruebas, elaboración de informes o el tratamiento integral con las familias. "Sólo contempla la atención directa con el menor, pero obliga a los CAIT, por ejemplo, a mantener el centro abierto los 12 meses del año", comenta Auxiliadora Sánchez.

Asedown calcula que si se adhiere al acuerdo marco, la asociación tendrá el próximo año un déficit de 50.000 euros. Esta entidad reconoce que aún no se ha decidido, aunque ve complicado continuar, pero otras entidades, como la Asociación Sevillana de Síndrome de Asperger, ya se han pronunciado en contra. En este caso, seguirán ofreciendo los servicios pero de forma privada, ya que el acuerdo de la Junta también prohíbe el copago. "Somos conscientes de que muchas familias no podrán asumir estos gastos", apunta Sánchez. Por esta razón, Asedown pide a los bancos y a las entidades sociales que colaboren con ellos en una bolsa de becas para familias sin recursos.

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