Milagros Vargas: "El acusado me ha mirado dos veces y se ha reído"

Milagros Vargas, la madre de Francisco José Guerrero, el joven que murió el 25 de marzo de 2011 apuñalado en la macrobotellona de la Fiesta de la Primavera, critió ayer el "cinismo" del presunto autor del crimen, Óscar Riquelme Rodríguez, de quien dijo ha llegado a mirarla "dos veces y se ha reído" de ella durante la primera sesión del juicio con jurado que ha comenzado hoy en la Audiencia de Sevilla.

La madre de la víctima se mostró "sorprendida" por la actitud del acusado, ya que, según dijo, parecía que "venía de vacaciones y no de pasarlo mal en prisión, y encima se ha reído dos veces de mí", ha lamentado Milagros Vargas, que alabó la intervención de la fiscal del caso y de su abogada durante las alegaciones previas al inicio de la vista oral.

Milagros Vargas recordó que la Fiscalía ha mantenido que los testimonios de la testigo protegida y de otro joven de Marchena son fundamentales para demostrar la culpabilidad del acusado, por lo que pidió en especial a la testigo protegida que declare "con la misma seguridad y contudencia como lo hizo en el juzgado, que no tenga miedo porque esto podría pasarle a cualquier otra madre". Milagros Vargas confió en que "se haga Justicia" en este caso y que se le imponga la máxima pena al acusado.

"Las leyes son las que hay y las que fija el Código Penal. Para mí, 1.000 años que le pusieran de condena me parecería poco", sentenció la madre de Francisco José Guerrero, que añadió que a su juicio el hecho de que el acusado siga en prisión sin fianza desmuestra que las pruebas en su contra son evidentes.