Muere Enrique Porta, maestro de sastres con marchamo de calidad

Su vida fue un traje a medida. Con los cortes que el azar, el ingenio y la aventura le aplicaron a una trayectoria propia de La saga de los Rius, la odisea textil de la fabril Cataluña. A sus 92 años falleció en Sevilla Enrique Porta Serrano, más de seis décadas jugando el Derby de la elegancia en su tienda de la calle Albareda esquina con General Polavieja. Eligió ese nombre porque era ropa inspirada en las carreras de caballos inglesas.

Nació el 27 de septiembre de 1920 en Barcelona. Sus tres hermanos nacieron en Cuba, donde Enrique llega con apenas un año y permanece hasta los 14. Su familia se dedicaba a la importación de carbón. Llega a Sevilla para hacer el servicio militar.

En los años 40 abre un pequeño taller en la calle Santas Patronas. En 1951, un negocio que lleva ese guarismo como marchamo de calidad. Derby 1951. La calidad le hizo protagonizar una edición de la revista Vogue. Padre de tres hijos, Celia, Enrique y Fernando, éste últrimo se incorporó en los 60 al negocio familiar. Ya hay una tercera generación, encarnada por su nieto Fernando, que en 2011 abrió una nueva tienda en la calle San Pablo.

Hermano de la Virgen de los Reyes, patrona de los sastres. Apasionado de la pesca y de la fotografía, con barco y estudio propio, cultivó esas aficiones hasta cumplidos los 90. Deja una vida llena y una estela donde sus orígenes, los inicios en los Almacenes Alemanes de Barcelona, se enriquecen con la apuesta de su descendencia por marcas innovadoras como Vilebrequin, ropa de baño, o el calzado de élite Allen Edmonds.