Las personas mayores de Sevilla tienen un plan de verano contra la soledad. El programa es fruto de la colaboración entre la Fundación Doña María (Fundomar) y el Ayuntamiento de Sevilla, dentro de la convocatoria de subvenciones Sevilla Solidaria, y consiste en la celebración de un ciclo de talleres de envejecimiento activo que se prolongaran hasta finales del mes de agosto.

En concreto, según informa la propia fundación, el programa incluye talleres de movimiento, memoria, bienestar y expresión corporal y se desarrollan en las instalaciones del centro cívico de La Ranilla. Actividades, todas, que tienen un marcado perfil femenino, ya que más del 90% de las participantes son mujeres, principalmente entre los 70 y 80 años. "Aunque cada vez nos encontramos más personas muy mayores que disfrutan igualmente de las actividades", matizan desde la Fundación.

El proyecto tiene un objetivo muy claro. "Mejorar la calidad de vida y llenar de actividades el verano de las personas mayores de nuestra ciudad, potenciando la creación de redes sociales de apoyo contra la soledad no deseada y fomentando valores como la gerontolescencia, el envejecimiento activo y la participación ciudadana de las personas mayores", recalcan las mismas fuentes.

La soledad no deseada ha sido definida como una "epidemia silenciosa" de nuestro tiempo, y está demostrado que puede causar efectos directos contra la salud similares a los del tabaquismo o la obesidad, facilitando la aparición de patologías cardiacas, artritis, depresión, demencias, además de incrementar las posibilidades de padecer trastornos psicológicos en las personas que la sufren.

Según el primer estudio sobre soledad no deseada en personas mayores de la Junta de Andalucía, el 47% de las personas andaluzas de 55 y más años manifiesta encontrarse en soledad no deseada. Un sentimiento de soledad que aumenta con la edad de forma preocupante, alcanzando al 66% de las personas de más de 80 años.

Con todo, el estudio señala, igualmente, el efecto protector sobre la soledad no deseada y el aislamiento social que tiene el asociacionismo y la participación social. "Dos objetivos clave para la Fundación Doña María", insiste la organización.

Los Talleres de la Fundación Doña María están subvencionados dentro de la convocatoria Sevilla Solidaria del Área de Hábitat Urbano y Cohesión Social del Ayuntamiento de Sevilla. Se trata de una iniciativa que busca la colaboración entre el consistorio y las entidades sin ánimo de lucro de nuestra ciudad para llegar al máximo posible de ciudadanos beneficiarios, y donde la Fundación Doña María lleva 16 años participando.

La Fundación explica que la Gerontolescencia es un concepto acuñado por la Organización Mundial de la Salud para referirse a una  nueva etapa vital de transición entre la adultez y la vejez, que viene determinada más por indicadores funcionales que por la edad cronológica. Y que se prolonga desde los 65-70 años hasta que nuestras capacidades físicas y cognitivas nos lo permiten.

"Una nueva etapa posibilitada por el incremento de la esperanza de vida y a los avances médicos y sociales, que hacen posible que personas mayores a nivel cronológico se encuentren en plenitud de su calidad de vida, y donde tienen mucho que aportar como agentes activos de la sociedad", añaden desde la Fundación Fundomar.