Hace ocho meses que la adjudicataria del Metropol Parasol de la Encarnación no recepciona más madera para el ensamble del umbráculo, y casi cinco meses de la paralización del montaje por problemas de financiación. A partir de marzo ya no será así, gracias a la inyección de 18 millones de euros que el Ayuntamiento aportará a la obra tras el recálculo de los costes y el cierre del proyecto constructivo. El delegado de Urbanismo, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, avanzó ayer que la construcción en altura de las setas de la Encarnación volverá a estar a pleno rendimiento a principios de marzo, cuando una cuadrilla de diez ingenieros alemanes se desplazará a Sevilla para conectar las lamas de madera que unirán los troncos P2 y P3 a una altura de entre 20 y 25 metros.

Tras realizar una visita en la que sirvió de guía a concejales de la oposición, Celis indicó que "la obra de la Encarnación enfila su finalización", aunque se negó a hablar de plazos. "Los plazos se sabrán cuando se termine el parasol entre los troncos 2 y 3; cuando se concluya, multiplicaremos el tiempo por los troncos que quedan y daremos una fecha", espetó el edil, quien insistió en que el ensamble de la estructura es una tarea pionera que requiere de una ingeniería específica nunca utilizada antes en construcción. Celis detalló que el parasol pesará 2.000 toneladas y estará ensamblado por 4.000 nudos interactivos que sustentarán las lamas.

Tampoco hay plazos para el traslado de los placeros al nuevo mercado pese a que las labores constructivas han concluido ya en ese nivel, a cota de calle. Los 37 años de provisionalidad que los comerciantes llevan en las naves aledañas podrían sumar uno más pese a que el mobiliario de los puestos y las cámaras frigoríficas llegarán en unos meses. Celis descartó indirectamente la apertura e inauguración del mercado antes de la próxima Semana Santa, la ultima fecha aportada por la Gerencia de Urbanismo a los placeros en las reuniones que mantienen habitualmente. El propio concejal confirmó que Sacyr formalizará el pedido del mobiliario la próxima semana y que éste llegará a Sevilla "en dos o tres meses", lo que sitúa el horizonte temporal en mayo. "Una vez que el mercado esté acabado, tendrá que ser la constructora la que nos dé garantías de que se puede inaugurar y abrir al público si no hay riesgos para la seguridad de comerciantes y visitantes por las obras en altura de los parasoles", matizó, lo que viene a decir que la apertura se podría dilatar a lo largo de este año e incluso del próximo.

El diseño de los puestos del mercados fue modificado -de redondos pasaron a ser semicuadrados-, y serán los primeros que cumplen con el tope máximo de espacio recogidos por normativa, de 20 metros cuadrados cada uno.

Gómez de Celis también hizo referencia a las obras del Antiquarium que pondrán en valor los restos arqueológicos hallados en la cripta de la plaza. Con un presupuesto cercano a los 5 millones de euros a cargo del Plan 5.000, el edil comentó que la musealización del recinto arrancará en mayo o junio próximo, por lo que el Consistorio tendrá que solicitar prórroga al Gobierno central para ampliar el plazo de ejecución de hasta mediados de 2011. Los restos romanos -datados en el siglo III- y árabes hallados en la zona se mostrarán al estilo del Museo de la Inquisición del Mercado de Triana, con una pasarela por la que se podrá discurrir para ver los mosaicos y las estancias, y con presencia de zonas audiovisuales y multimedia. El techo de la cripta se pintará de negro y el perímetro del foso se revestirá de paredes de vidrio al ácido. Ayer mismo, los estanques de salazones se hallaban cubiertos de agua al mismo nivel que el río.

Ya en altura, la pasarela peatonal que corona los parasoles luce ya la nueva barandilla antiescala que sustituye a la original que contemplaba el proyecto para reforzar la seguridad. Con más de un 1,4 metros de altura y un perfil curvado hacia el interior, impide cualquier intento de salto sin interferir las vistas. Celis recordó que las visitas a la pasarela -donde se ubica el restaurante panorámico a 23 metros de altura- serán gratuitas, y que únicamente se cobrará a los turistas la subida al mirador, situado a 28 metros. Los sevillanos estarán exentos del pago.