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Un adarve unirá Santa Cruz y San Bartolomé a través de Las Teresas

  • El documento prevé con esta actuación mejorar la permeabilidad en la zona. En este sector se localiza el núcleo fundacional de Sevilla y cuenta con importantes restos arqueológicos.

Crear nuevas conexiones públicas, realinear calles y fachadas, y poner en valor importantes enclaves patrimoniales y restos arqueológicos, son algunas de las actuaciones contempladas en el Plan Especial de Protección del Sector 7 Catedral del Conjunto Histórico de Sevilla que actualmente se encuentra en la fase de respuesta a las alegaciones presentadas, tras ser aprobado inicialmente por la junta de gobierno el pasado mes de enero. El documento prevé siete actuaciones no contempladas en el PGOU, a desarrollar a través de planes especiales de reforma interior o estudios de detalle. Destaca, la apertura de dos adarves ya existentes y su ampliación mediante la creación de un pasaje bajo la edificación del convento de Las Teresas, para conectar la calle Cruces con Santa Teresa a través de dos de las manzanas más grandes y cerradas de la zona, y unir, de este modo, dos barrios tan importantes como San Bartolomé y Santa Cruz.

Los arquitectos que han redactado el Plan han planteado una intervención en el límite de la parcela conventual, que no afectaría a la edificación principal y sólo a espacios libres en la parte trasera y puntualmente a edificaciones secundarias de escaso valor, mediante la que poder unir estos dos adarves que ya existen, uno en la calle Santa Teresa y otro en Doncellas, para establecer esta conexión entre dos ámbitos aislados actualmente. La actuación sería en aras de "favorecer una cierta permeabilidad, especialmente en el entorno de edificios patrimoniales". El propio Plan General ya contempla para este sector una actuación para establecer un enlace entre la calle Consuelo y la Plaza de Doña Elvira.

El Plan Especial del Sector Catedral contempla la apertura de un nuevo espacio peatonal que unirá la calle Federico Sánchez Bedoya con la zona del Postigo a través de la Plaza del Cabildo. Para ello, se convertirá en zona pública el espacio libre existente tras la sede del SAS (Avenida de la Constitución), que actualmente se usa como aparcamiento. La conexión se establecerá mediante una apertura en el lienzo de muralla de la Plaza del Cabildo frente al extremo occidental de la galería que delimita este lugar.

También se intervendrá en una de las asignaturas pendientes de la ciudad: las columnas de la calle Mármoles. Es un problema difícil de resolver, por lo que se estudia una gran reforma interior para integrar los restos en un entorno coherente con espacios libres y un edificio de apoyo a la interpretación. Se prevé sustituir el edificio de viviendas existente por una nueva edificación residencial que se dispondrá, siempre que lo permita la intervención arqueológica, preferiblemente con fachada a la calle Abades, 5. El arquitecto Rafael Vioque, uno de los técnicos que ha redactado el plan, recalca la importancia de esta actuación: "Es una asignatura pendiente de la ciudad. La edificación contigua es poco atenta con el valor patrimonial de los restos. Es uno de los lugares históricos más frágiles y difíciles de resolver. Hay que hacer una nueva intervención arqueológica para determinar a qué estructura pertenecen las columnas y conseguir un entorno adecuado".

El Plan Especial del sector de la Catedral es el último que se ha redactado de los pertenecientes al conjunto histórico de la ciudad. Se trata de una zona muy compleja y extensa por la densidad de edificaciones, cuenta con más de 1.000 parcelas. Es el sector más turístico y el más antiguo de Sevilla. Ahí se localiza el primer asentamiento. Incorpora, como parte fundamental, el barrio de Santa Cruz, y el núcleo Patrimonio de la Humanidad, salvo el Alcázar que cuenta con un plan propio. También se extiende por el eje de la Avenida con importantes edificios públicos. Su objetivo no es sólo proteger el patrimonio arquitectónico, arqueológico y el espacio urbano; también el etnológico, como el comercio tradicional.

Se han catalogado un total de 755 edificios, 41 considerados monumentales, 17 de ellos con el máximo nivel de protección (A); y 18 espacios públicos. La zona cuenta, además con una importante colección de casas-palacios, casas-patios y otros edificios singulares.

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